Noviembre: ¡juventud y revolución!

En México, el 20 de noviembre se celebra como el día de inicio de la Revolución en 1910, sin embargo, muchos años antes un grupo de mujeres y hombres jóvenes guiados por Ricardo Flores Magón ya habían iniciado un movimiento armado, no sólo para deponer al dictador, sino también para alertarnos de la amenaza imperialista. Ricardo Flores Magón “murió de una enfermedad cardiaca” según los médicos de la cárcel de Leavenworth, Kansas, Estados Unidos en medio de indignación y grandes protestas exigiendo su libertad. Pretendieron acabar con su labor antimperialista.

A 100 años de la muerte de Ricardo Flores Magón, reproducimos algunos fragmentos de su obra en diferentes años, que muestran su carácter revolucionario:

No fueron los ricos los que rodearon a Hidalgo en su empresa de gigante: fueron los pobres, fueron los desheredados, fueron los parias, los que amasaron con su sangre y con sus vidas la gloria de Granaditas, la tragedia de Calderón y la epopeya de Las Cruces. Los pobres son la fuerza, no porque son pobres, sino porque son el mayor número. Cuando los pueblos tengan la conciencia de que son más fuertes que sus dominadores, no habrá más tiranos”.

-Ricardo Flores Magón, fragmento de su discurso pronunciado en el centenario de la Independencia de México, septiembre de 1910.

Un año después….

“No es el voto, el derecho de pensar ni el de reunión, ni de ninguna otra de las facultades políticas que dan las leyes lo que da de comer al trabajador. El derecho de votar es un sarcasmo. Bienes materiales es lo que necesita el pueblo para poder ser libre. Que tome el pueblo posesión de la tierra y de los instrumentos de trabajo. ¿Es locura esto? Así lo aseguran los cobardes, los ignorantes y los que tienen empeño en que continúe el actual sistema de explotación a la clase trabajadora. Todos aquellos que tienen deseos de ocupar puestos públicos grandes o chicos; todos aquellos que quieren vivir a expensas de los demás, desean que Madero triunfe; pero el pueblo trabajador sensato, el que no cuenta con más capital que sus manos encallecidas en las duras labores a que lo sujetan los burgueses, los trabajadores que han sabido entender lo que Regeneración les enseña, esos no pueden seguir a Madero, no pueden seguir a los que hacen de la política su modo de vivir, sino que están dispuestos a continuar la lucha de clases, la lucha contra el capitalismo hasta hacerlo morder el polvo.”

-Ricardo Flores Magón, 1911.

Para el siguiente año:

¿Quiere paz la burguesía? ¡Pues que se convierta en clase trabajadora! ¿Quieren paz los que hacen de autoridad? Pues que se quiten las levitas y empuñen, como hombres, el pico y la pala, el arado y el azadón. Porque mientras haya desigualdad; mientras que unos trabajen para que otros consuman; mientras existan las palabras “burguesía” y “plebe”, no habrá paz; habrá guerra sin cuartel.

-Ricardo Flores Magón, fragmento de su discurso pronunciado a los trabajadores en Junio de 1912.

Para 1914….

“El trabajador que empuña una boleta electoral es digno de lástima, porque él mismo se nombra a sus verdugos, él mismo fabrica el látigo que ha de cruzarle el rostro, él mismo permite que perdure este sistema infame en que, para darse una vida regalada, es preciso tener bajo los pies a los débiles, a los ignorantes y a los tontos.”

-Ricardo Flores Magón, 1914.

En noviembre tampoco debemos olvidar a otro joven internacionalista, que a sus 28 años, en 1817 fue fusilado por el ejército realista. Nos referimos a Xavier Mina, nacido en Otano, Navarra; y quien junto a Fray Servando Teresa de Mier y aproximadamente 250 hombres, desembarcaron en nuestro país dispuestos a impulsar la lucha revolucionaria que se encontraba “adormilada”, después de perder a Hidalgo y Morelos, traicionados y fusilados por la corona española.

Muchos años después, en 1974 dos jóvenes rebeldes, sin dudarlo empeñaron sus esfuerzos para liberar a nuestro país del control imperialista.

El compañero Gabriel, fue el primer compañero que murió en al ataque de los soldados a la Casa Grande de Nepantla. No hubo advertencia ni diálogo, nada. La orden era matar.

Unos días después, en el mismo año, el compañero Alfonso no sólo empuñó las armas para no ser muerto en la Selva Lacandona, sino que, como su primer acto de rebeldía, marchó junto a sus compañeros a expulsar a los saboteadores yanquis que se entrenaban en sobrevivencia en la selva mexicana contando con la anuencia del gobierno mexicano. Lo hizo porque era su deber antimperialista. El compañero Alfonso es uno más de los compañeros desaparecidos políticos por quienes exigimos ¡Vivos se los llevaron! ¡Vivos los queremos!

Gabriel, Alfonso, dos compañeros jóvenes, mexicanos, antimperialistas, un mismo destino. Ambos nacidos en el mes de noviembre.

También en noviembre, pero de 1983, 17 de noviembre hace 39 años, 6 compañeros militantes de las FLN, “subieron” y se quedaron en las montañas del sureste mexicano, el primer contingente de compañeros jóvenes y rebeldes para iniciar la formación del ahora conocido EZLN. Un mismo deber antimperialista. La historia no concluye…