Julio, 2024. Muchos recordatorios que llegan a nuestra memoria colectiva.

En julio recordamos a nuestro compañero Héctor, militante chiapaneco de las FLN, que junto al compañero Manuel, inició en 1972 los trabajos en el rancho El Chilar en el municipio de Ocosingo, Chiapas, lugar a donde posteriormente llegarían los demás compañeros del Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata, desaparecidos en 1974 por el Ejército Mexicano. Héctor participó en la expulsión del campamento de norteamericanos en la Laguna del Ocotal.

El mes de Julio nos recuerda también al inolvidable General Francisco Villa, asesinado hace 101 años en Parral, Chihuahua, gran estratega militar que nos deja su ejemplo de lucha y que fue capaz de organizar la gran División del Norte, que en esos años hizo temblar al imperialismo norteamericano. Congruente con la defensa del pueblo, confiscó tierras a los latifundistas para repartirlas entre los desposeídos, embargó tiendas para distribuir recursos a viudas y huérfanos de los caídos en la revolución y mandó construir hospitales y escuelas, pues valoraba más la labor del maestro que la del militar.

En julio del año 2000 nace la Casa del Dr. Margil, antecedente de la Casa de Todas y Todos en Apodaca, N.L. y en julio de 2013… hace 11 años nace nuestra página editorial https://lacasadetodasytodos.org

Julio también es el mes cuando recordamos, este año, el 4º Aniversario del fallecimiento de nuestro inolvidable compañero Teniente Insurgente Frank, Pancho, Francisco… primer comisario político en las montañas del sureste mexicano y fundador, junto a otros compañeros, del EZLN en noviembre de 1983.

En julio, recién conocimos el resultado de la “democracia electoral”, que nuevamente convocó a las urnas a millones de mexicanas y mexicanos. Durante meses, sufrimos todas y todos, una campaña publicitaria con despilfarro de recursos del pueblo, que nuevamente intentó convencernos que vivimos en otro México, pero la realidad se impone nuevamente ante los desaparecidos o asesinados, que demuestran que en nuestro país no existe la verdad ni la justicia.

La izquierda oficial está de júbilo ante el triunfo arrollador de la candidata a la Presidencia por la coalición Morena-PVEM-PT, Claudia Sheinbaum, mientras la coalición de “derecha” del PRI-PAN-PRD niega su derrota, llora, patalea y advierte sobre del colapso que se avecina para el país.

De los 98 millones 320 mil 591 personas registradas en la lista nominal, el 61 por ciento participó en las elecciones del pasado 2 de junio (69.6 millones), mientras el 39 por ciento restante se abstuvo (28.7 millones). De los abstencionistas casi nadie habla, pues la versión más común es que si no votan “es por desidia o indiferencia” ¿O será que ninguna propuesta los convence o no creen en el sistema electoral como camino para lograr un cambio en el país? A esto habremos de agregar que un millón 400 mil 144 mexicanos acudieron a las urnas para anular su voto. En números redondos del total de la población de casi 130 millones, Morena tiene 36 millones de votantes, un 26%, los otros 100 millones, ya se verá en el futuro las nuevas condiciones.

Otra reflexión pendiente; “Sigamos Haciendo Historia” obtuvo porcentajes mayores al 50% en Puebla y Veracruz y cercanos al 80% en Tabasco y Chiapas, en Morelos no llegó al 30% pero ganó, no por el convencimiento o la buena obra, sino que refleja el corporativismo actual y hace recordar aquellos tiempos del PRI Gobierno donde era similar o llegaba al 100% de los votos, mientras el PRIAN-RD sólo retuvo Guanajuato (51.28%) y Movimiento Ciudadano sólo la gubernatura de Jalisco (40.85). En resumen, el país se pintó de guinda porque Morena además de ganar la Presidencia de la República gobernará 21 estados.

Además, llegara quien llegara, pero con más razón los que llegan con la gran presión social del incumplimiento de los temas cruciales, las demandas sociales, y el principal, la justicia que no llega ni de tarde ni de noche, bajo mil pretextos, excusas, mentiras, promesas, esos dolores y esperanzas siguen estando pendientes.

Los hechos indican que la presidenta electa continuará la militarización del país con el aumento al presupuesto de las fuerzas armadas y la incorporación de militares como empresarios en las obras públicas llamadas “estratégicas”: Tren Maya, el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, aduanas y aeropuertos, entre muchas más obras ya anunciadas desde la campaña y desde  el saqueo de recursos y movimiento de mercancías que intensifican y expanden el capitalismo en México y América latina. A cambio más hora-doctrina en las escuelas, menos condiciones laborales, mayores desplazamientos forzados, expulsión de territorios, explotación en nodos industriales, ecocidios, abandonos del campo, extorsión y represión policiaca, represión a mujeres, campesinos, indígenas, defensores de derechos humanos, migrantes, impunidad e indolencia en crímenes de lesa humanidad que a la fecha no se resuelven. y porque, aunque se nieguen, existen y se viven.

Fiel al servilismo frente al imperialismo, la nueva presidenta conversó con la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georigieva, con el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga y con el secretario de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Matías Cormann, mientras las Empresas Globales (EG), grupo integrado por 60 firmas transnacionales que operan en México, celebraron el triunfo de la “izquierda” y pidieron certidumbre jurídica y seguridad, lo que significa libertad para seguir robando, especulando y explotando al pueblo.

Esto demuestra el papel del Estado como sirviente del capital, pues la presidenta virtual ha recibido en dos ocasiones al director general de la empresa Black Rock México, Sergio Méndez, quien manifestó el interés de la corporación en aumentar sus proyectos de inversión en el país. Black Rock, es una empresa trasnacional de capital financiero especulativo que se ha beneficiado del gobierno obradorista.

La Cuarta Transformación es un proyecto para rescatar y recomponer al Estado en crisis que dejaron los gobiernos neoliberales del PRIAN y que ya era obsoleto para el capital, por el peligro de inestabilidad social que provocaba y que se mantiene, somos generaciones enteras viviendo en la inestabilidad permanente. Al mismo tiempo, genera desmovilización de la sociedad y una creciente militarización y control de amplias zonas por parte del crimen organizado. Ya se verá quiénes se beneficiarán y a quién se reprime, a quién se golpea o expulsa a quiénes se apapachan o perdonan deudas o impuestos, a quiénes se les darán las facilidades para invertir o para tener los mayores foros, véase los próximos gabinetes y se verá ahí el rumbo.

Todo lo anterior nos demuestra que la 4T es un distractor de las grandes demandas que llevaron a la revolución de 1910, porque el Estado nunca realizará los cambios sociales que resuelvan éstas demandas, como ya lo veremos. La transformación social profunda no se logrará con programas, becas y pensiones, y aunque se afirme que cinco millones de mexicanos salieron de la pobreza extrema durante éste sexenio, esos apoyos sólo serán un parche al terrible problema de la desigualdad social.

Un elemento significativo de la 4T es su recurrente intento de apropiación de la historia de muchos movimientos que han luchado por todas las formas, pero que no compartían ni comparten la lucha electoral y que la actual ola arribista reclama como procesos que los llevaron al poder, cuando en realidad fue un uso electoral del descontento y el hartazgo, además el pueblo, los pueblos de México no quieren regresar a los años del partido de Estado, eso está claro, pero tampoco quieren la burla de aparentar cambios ni desean tampoco a la derecha ni al fascismo que se cierne, lo que los pueblos impulsan y buscan es una gran transformación desde abajo, un gran movimiento del que surgen los procesos necesarios para la libertad, la verdadera democracia y la justicia.

También un 1º de julio, pero del año 1789, nace en Otano, Navarra, Xabier Mina, que, a sus 28 años de edad, es asesinado en nuestro país por incorporarse a la lucha de independencia de nuestro pueblo. Mina es el insurgente recordado en muchas tierras a ambos lados del mar como uno de los primeros guerrilleros internacionalistas, uno de los más jóvenes insurgentes que lucharon por la libertad y contra la monarquía, por la justicia y contra la dominación, contra el imperialismo y por los derechos de los pueblos.

Recordamos su travesía desde Europa a las Antillas en el Calypso, sus encuentros en Haití, el primer país independiente de América en la gran gesta de los pueblos negros, el recorrido desde unas nacientes colonias convertidas después en una potencia capitalista para llegar al noroeste de México y el puerto de Soto la Marina; recordamos sus dos proclamas por la independencia y la libertad, su expedición al Bajío para encontrarse con Pedro Moreno en la posible expansión y continuidad de la lucha al oriente y al occidente para articularse con los otros insurgentes del sur de México; lo recordamos, y con él, a Servando Teresa de Mier y a los cientos de combatientes internacionales y las esperanzas de millones de hombres y mujeres en un continente insurrecto.

Hace 7 años, el director de la Casa de Todas y Todos entregó al pueblo de Otano, en Navarra, País Vasco, una placa que fue colocada en un obelisco que representa la memoria de ambos pueblos hermanados en sus luchas e historias por la soberanía que reside en los pueblos. Mina proclamó el 22 de febrero de 1817 en Galveston: Sin echar por tierra en todas partes el coloso del despotismo, sostenido por los fanáticos y monopolistas, jamás podremos recuperar nuestra dignidad.

El principal ejemplo que nos deja Mina es anteponer los principios y la consecuencia antes que cualquier beneficio personal, antes que cualquier cargo, antes que cualquier rápido acuerdo insostenible, antes que cualquier puesto, rendición o claudicar. Primero los principios, primero luchar por la dignidad.

¡Vivir por la patria! o ¡Morir por la libertad!

Grupo editorial de la Casa de Todas y Todos.




Junio, mes de acontecimientos que no se olvidan…

Al grito de “¡Viva el Che Guevara!”, el grupo de choque “Los Halcones”, entrenado por la Dirección Federal de Seguridad y la agencia de espionaje norteamericana (CIA), arremetió a balazos contra el contingente de estudiantes desde las calles aledañas a las avenidas Carpio y de los Maestros, después de que los granaderos cómplices les abrieran fila. Los paramilitares iban armados con varas de bambú, palos de kendo y porras, y en un principio fueron fácilmente repelidos por los manifestantes.

Los Halcones atacaron por segunda ocasión con garrotes y armas de fuego, bajo la mirada complaciente de los granaderos, e iniciaron el tiroteo y golpiza contra los jóvenes que se prolongó por varias horas. Camiones cargados con armas y parque abastecieron a los agresores para facilitar su acción criminal. El saldo de las víctimas es aún desconocido, pero se estima que fueron más de 120 muertos y decenas de heridos que fueron trasladados al hospital Rubén Leñero, a donde los Halcones llegaron para rematar a varios jóvenes en los quirófanos e intimidar a internos y al personal médico.

Ese Jueves de Corpus sólo es la continuidad de un Estado criminal que respondió con violencia a los reclamos estudiantiles de 1968 bajo el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, cuando Luis Echeverría ocupaba la Secretaría de Gobernación. Ambos fueron cómplices de la represión que buscaba asegurar la celebración de los Juegos Olímpicos en un estado de aparente calma. Hoy es un hecho comprobado que detrás de los genocidas hechos gobierno estaba la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos y el imperialismo, al que servían como espías.

A 53 años del genocidio la memoria sigue viva, porque el 10 de junio nos alerta sobre el peligro de un Estado autoritario, ciego y sordo a los reclamos sociales, que sólo es posible enfrentar mediante la lucha permanente en todos los rincones, formas y trincheras posibles.

¡Porque el 10 de junio y el 2 de octubre no se olvidan!

¡Porque las y los desaparecidos están en nuestras luchas!

¡La lucha y la resistencia siguen!

No olvidamos tampoco que el 19 de junio de 1867, Maximiliano de Habsburgo fue fusilado en el Cerro de las Campanas, junto a los militares conservadores Tomás Mejía y Miguel Miramón, luego de ser capturados por las fuerzas republicanas de Mariano Escobedo en el sitio de Querétaro. Porque la derrota de los enemigos del pueblo, es motivo de fiesta que también debemos recordar.

Recordamos ahora en estos días la lucha de las Madres de plaza de Mayo, su lucha hermana por la justicia y la presentación de los desaparecidos de Argentina y de todo el mundo, en especial a Nora Cortiñas y con ella hablando desde el sur de un continente entero, recordamos los 96 años del nacimiento del Comandante Ernesto Che Guevara el 14 de junio.

De nuestras efemérides, este mes recordamos a nuestros compañeros Ruth y Manolo, nacidos en junio.

Nuestro compañero Mario escribió en el Nepantla 5 (el 22 de junio de 1979), que Manolo nació un 10 de junio de 1936 en el Estado de Veracruz, que perdió a su madre a muy temprana edad y que ya en la década de los cincuentas se traslada a Monterrey, donde trabajó como ayudante de cocina mientras estudiaba secundaria y luego bachillerato y profesional. Ya como estudiante de la UNL (Universidad de Nuevo León, pues todavía no era Autónoma), comprendió la necesidad de crear una organización de carácter nacional y se integra al fallido intento guerrillero del Ejército Insurgente Mexicano, dirigido por el periodista Mario Menéndez. Comprendió la necesidad de retomar la fracasada empresa y junto con otros compañeros se da a la terea de aglutinar a los elementos dispersos que participaron en ella y que supieron mantener, en medio de sus adversidades, la moral alta y la fe en el triunfo.

Es así que Manolo forma parte de los compañeros fundadores de las FLN, que comprendieron que regresar a las montañas no era sólo una cuestión de “meses”. Junto con nuestros compañeros fundadores, entiende que la tarea revolucionaria requiere de tiempo para la maduración de las condiciones que faciliten su desarrollo.  Así que desde entonces cumple disciplinadamente las pequeñas tereas que los difíciles comienzos imponen a esos “pequeños pasos” que hacen “correr” a la revolución.

Manolo era el responsable de la formación integral de las compañeras y compañeros que vivían con él en la Casa Grande de Nepantla. Fue asesinado por la Dirección Federal de Seguridad, policías judiciales federales, regionales y el Ejército Federal Mexicano, junto a las demás compañeros y compañeros que lo acompañaban, el 14 de febrero de 1974.

Un día que es un trámite y un dolor.

En otro punto, éste 2 de junio es el único día en que existimos los electores… Para el Estado, sólo éste día somos importantes como trabajadoras y trabajadores, niñas y niños, personas con discapacidad, personas de la tercera edad, enfermos que necesitan atención médica y medicamentos, como ciudadanos pues. Somos quienes vamos a “decidir” el futuro mediante el voto… incluso “se debe dar permiso a los trabajadores para ir a votar”.

Esta elección es de singular importancia, pues termina el sexenio de Andrés Manuel López Obrador; se eligen ocho gobernadores, 128 senadores, 500 diputados, representantes a los Congresos locales, alcaldías y Juntas Municipales; en total, más de 19 mil cargos para los próximos seis años (de 2024 a 2030). Y claro que hay interés de todos los candidatos, en que los ciudadanos confirmen, con su voto, de que en México hay democracia. Por eso el interés en que “reflexionemos”, que no faltemos, que nuestro voto es importante y que con él “decidimos” el futuro del país. Por eso la “rebatinga” por los cargos públicos, y como cada seis años, el interés por el ciudadano y la insistencia en que vayamos a votar. Además, buscan mayoría en los Congresos locales o federales para avalar cualquier decisión, incluso para modificar, a su conveniencia, los artículos de la Constitución.

Durante la campaña electoral a la Presidencia de la República que acaba de concluir, afloraron de nuevo los intereses de políticos protegidos en la impunidad de la Cuarta Transformación, movimiento que suponía un cambio político de fondo para el país, llevando a una polaridad entre los ciudadanos, que llevada al extremo es muy peligrosa.

Un objetivo de la Cuarta Transformación es recomponer el Estado mexicano que estaba en total deterioro al terminar el sexenio de Enrique Peña Nieto. El Estado como fuerza e instrumento de dominación de clase. Esto incluye la rehabilitación del PRI con otro nombre y otro color como parte de la estrategia del capitalismo en México.

La recomposición del partido de Estado ha sido impulsada por López Obrador mediante dos maniobras: el debilitamiento del PRIAN con denuncias de corrupción en las conferencias mañaneras y las “benditas redes sociales”, y la incorporación de sus miembros a Morena, para integrar así una mescolanza que algunos llaman PRI-Mor, el nuevo PRI de color guinda.

El ropaje de “izquierda” con que aparece Amlo y Morena es solamente una maniobra para recuperar la imagen perdida del Estado “democrático y plural” y atraer fuerzas que le ayuden a legitimarse, pero muchos han caído en el señuelo por conveniencia, desesperanza, falta de claridad o las tres juntas.

A éstas alturas es muy clara la estrategia del Estado, que sólo se oculta a quienes no quieren verla: El partido Morena arropa a los viejos prianistas que dice combatir con el argumento de que la 4T es un movimiento amplio donde todos caben, mientras estén dispuestos a ayudar a la “transformación” del país por medio de clientelismos, corporativismos, “programas sociales” y no derechos, caridad y no justicia.

En varias cosas se nota una cercanía de Morena hacia el PRI, y lo vemos en las críticas constantes de López Obrador contra los expresidentes panistas, mientras guarda silencio hacia Enrique Peña Nieto, a quien hace poco calificó de “demócrata”, junto con Alfredo del Mazo, exgobernador del estado de México.

El pasado 27 de mayo, la excandidata a la gubernatura del Estado de México, Alejandra del Moral, anunció su renuncia al PRI y su incorporación a la campaña de Claudia Sheinbaum, quien aseguró que después de una plática a puertas cerradas, “encontraron más coincidencias que diferencias”. Del Moral es una más de las incorporaciones priístas, pero lo importante aquí es que ella es parte del Grupo Atlacomulco, que incluye a Eruviel Ávila (exgobernador del estado de México por el Partido Verde), Alejandro Murat (exgobernador de Oaxaca por el PRI) y al expresidente Enrique Peña Nieto.

En el caso de Alejandra del Moral, Morena justifica la incorporación de forma “pragmática”, al asegurar que la expriísta llevará casi tres millones de votos del Estado de México a la alianza “Sigamos Haciendo Historia” y los restará a la coalición Fuerza y Corazón por México, representada por la candidata Xóchitl Gálvez. La mirada de Morena está puesta no sólo en arrasar en las elecciones, sino en ganar la mayoría calificada (tres cuartas partes de los votos) en el Congreso y el Senado, para impulsar los cambios que dejó pendientes López Obrador y para ello se vale de todo.

Ya se verá si después hay continuidad o sólo reacomodos, recuerde a Lili Téllez, llegando por la 4T al Senado, o los miles de casos de personas y candidatos se visten con gorra de PT, bolsa de Movimiento ciudadano, las banderas del Verde, camisetas del PAN, se cambian en cada carro o en cada cuadra, donde los cuerpos se visten de los colores mezclados, que viajan en un autobús revestido de la campaña de Xóchitl al mitin de Claudia y gritan por algún cacique candidato o a cambio de arreglar un trámite o una despensa. ¿se acabó el viejo régimen? Las multas, cacería en vía pública para llevar la cuota a los mandos, las extorsiones a miles de migrantes hombres, mujeres, niños y niñas que a pie recorren miles de kilómetros sin más apoyo que el de algunos pueblos, los golpes, la represión a las mujeres en las movilizaciones pacíficas, los convoyes militares y policíacos en los pueblos, las calles y plazas, el aumento al salario y negocios militares, los encapsulamientos de manifestantes por el supuestamente extinto cuerpo de granaderos, la fabricación de delitos, la impunidad a los responsables de la violación a derechos humanos. El negocio abierto de plazas y cobros escolares de todos los niveles, la ideología de empresas como OXXO que distribuye libros de ética en las escuelas, los cursos de yoga, las empresas que lo mismo financian tecnología y armamento que programas en universidades de todo el mundo, y agregue la descalificación de las ideas y acuerdos ¿se acabó el neoliberalismo? ¿se acabó la corrupción? No es sólo un asunto de ministros sino de los ejemplos cupulares de que todo se puede y todo se vale, que el fin justifica los métodos, ése es el verdadero rostro del sistema y el juego electorero que sólo suplanta derechos, finge democracia y aparenta paz, cuando cientos de comunidades son asediadas por el crimen y los derechos de los trabajadores o los familiares de desaparecidos pueden esperar, total ya esperaron 6 años, han esperado, 20, 30 , 40, 50 años, que esperen hasta que pase el día sagrado de las élites, donde se reafirman en su comunión de poder político y económico.

Los pueblos de México no quieren regresar al pasado del PRI-gobierno, pero tampoco la simulación actual, ni el desesperanzador vota por quién sea, mejor cualquiera que los punteros, mejor nada. No. Los pueblos han demostrado que aún en las condiciones más difíciles y en las mentiras más refinadas se van entretejiendo acuerdos y pasos, vea usted la radiografía de las resistencias y verá ahí otro país, el de abajo, el que tiene memoria por las y los desparecidos y justicia para las víctimas no premios para victimarios, el que se organiza en todas sus formas mucho más allá que la electorera, el país de milenarias experiencias de otras formas de gobernarse, de impartir justica, salud, educación, el que acompaña movimientos, huelgas, autonomías, luchas, resistencias, el país que sí es humanista, el que lucha por la paz para Palestina y para todo el planeta, el que abraza de verdad a migrantes, el que no intenta participar en elecciones a modo, los que luchan todos los días, no sólo un día.

Por último, no podemos dejar de mencionar el saldo que lleva el desarrollo de la “fiesta de la democracia”, pues no todo es “jaloneo” visible entre partidos… también hay muerte, amenazas políticas, incluso varios lugares donde ni siquiera se podrán instalar casillas. Al cierre de las campañas, 34 candidatos o aspirantes a puestos de elección popular han sido asesinados; al menos 8 en Chiapas, 6 en Guerrero y 4 en Michoacán. Ahí no hay cuenta que diga quién va adelante en las encuestas, pero al menos hay 14 bajas de Morena, 4 del PRI, 4 del PRD, 3 del PV, 1 del PT y 11 de Movimiento Ciudadano, sumando el fatal incidente en uno de los municipios más ricos de México.

Según Armando Vargas, consultor de Integralia en el periódico El Economista, “este proceso estuvo marcado por la alta intervención del crimen organizado, a través de violencia política. Las estadísticas señalan que, si se considera el tipo de agresión, la mayoría fueron amenazas (181), seguido por atentados (54) y asesinato (34), aunque hay otras 47 de diferente tipo. Del total de víctimas de ese tipo de ataques, 239 fueron del ámbito municipal, 31 del federal, 25 estatal y 24 no se identifica. El partido con mayor número de militantes víctimas de este tipo de agresiones es Morena, con 61, seguido por PRI, con 58; PAN, 43; MC, 30; PVEM, 20 y PT, 13.”.

Así las cosas, podemos concluir que este gobierno se disfraza de izquierda, da migajas y no derechos, se alía sin principios a las órdenes del poder, se mezcla en turbulentos juegos de hipocresía, descalificación, mentiras y compra de conciencias.

El Estado no deja de ser un aparato al servicio de los intereses capitalistas, por mucho que se maquille y cambie de color. Sólo se recompone para mantener el poder que permite al capital seguir haciendo negocios. El pueblo sigue estando ausente y sólo es llamado a votar cada seis años para legitimar el despojo y la explotación.

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.




1º de mayo… día internacional de las trabajadoras y los trabajadores.

Hace algunos años escribíamos en nuestra página: “Cómo olvidar a la Comuna de Paris, a los obreros ahorcados en Chicago, a las masacres del imperialismo colonialista en África, a los barcos negreros que venían a América, a las guerras de rapiña imperialista en Asia, a los genocidios, a las guerras de conquista por el petróleo, al sufrimiento de los niños migrantes enjaulados como animales… el eco de la internacional persiste en todos los corazones”

Este mes de mayo, el mismo espíritu de indignación flota en el mundo ante la misma brutalidad policiaca reflejada en los policías antimotines, protegidos hasta los dientes, ante el temor que reflejan sus miradas por la escalada de protestas para exigir un alto al fuego en la guerra de Israel en franja de Gaza, un temor que llegó al corazón mismo del imperio americano.

Miles de estudiantes de más de 40 universidades de Estados Unidos se enfrentan en éstos días a policías antimotines, que muestran su “valentía” montados en caballos como si no fuera suficiente el equipo y el respaldo que tienen por quienes los mandan. Los muchachos son detenidos y golpeados, durante las movilizaciones donde exigen al gobierno de Joe Bin Biden sacar las manos de la guerra de exterminio del gobierno israelí contra el pueblo palestino.

Las protestas pacíficas, por estudiantes armados de indignación y valentía, recuerdan la insurgencia estudiantil de 1968 contra la invasión de Estados Unidos a Vietnam y en 2003 contra la guerra en Irak, y al igual que en aquellos años, tienen como respuesta la represión de la policía, que desaloja los campamentos de estudiantes en universidades de Columbia (Nueva York), Boston, Arizona, Indiana, California y cerca de 850 pueblos y ciudades norteamericanas.

De Boston a Texas y de Chicago a Florida, cada vez más estudiantes exigen que sus escuelas se sumen al rechazo contra el apoyo de sus propias universidades por órdenes de los altos funcionarios imperialistas de Washington al gobierno israelí y el silencio cómplice, la indolencia internacional y el expectante negocio sobre las ruinas de un pueblo entero para rehacer los negocios en tierra arrasada, en la guerra de exterminio que hasta hoy ha dejado más de 34 mil muertos, miles de heridos, más de 1.7 millones de desplazados, devastación y daños incalculables en franja de Gaza.

A todo ello hay que agregar la desesperante hambruna crítica que padecen millones de habitantes de Medio Oriente, África y América Latina, mientras los mega millonarios y la sociedad de consumo de espectáculo gastan fortunas en joyería, perfumes y teléfonos celulares.

La foto del dolor en Gaza.
Primer Premio World Press Photo 

El repudio contra el gobierno de Biden une a estudiantes de todos los credos religiosos: judíos, musulmanes, cristianos, ateos y otros, que expresan su ira y repudio a la ofensiva israelí y critican la complicidad del gobierno estadunidense y líderes políticos que buscan criminalizar las protestas al calificarlas de antisemitas.

En Austin, la movilización de unos 200 estudiantes en la Universidad de Texas fue emboscada por unos 500 elementos de la policía local y estatal, y con equipo especial, golpearon, tiraron al piso y arrestaron a 20 estudiantes.

Los universitarios, muchos de ellos trabajadores y muchos de ellos y ellas próximos trabajadores, exigen que sus centros educativos corten lazos financieros con Israel y retiren sus inversiones de compañías implicadas en el conflicto bélico. Cientos de inconformes han sido detenidos por allanamiento o alteración del orden. Las protestas se extienden a Europa, y es desde hace meses un continuo clamor y exigencia planetaria.

En la Universidad Politécnica Estatal de California en Humboldt, los estudiantes usaron muebles, carpas, cadenas y bridas para bloquear los accesos a un edificio el lunes por la noche. En la Universidad de Columbia, aunque la policía trató de retirar el campamento de protesta en favor de Palestina el jueves pasado al arrestar a 100 estudiantes, unas 60 tiendas de campaña permanecían en el campus con alumnos entrando y saliendo.

En noviembre de 2023, manifestantes gritaban en el Congreso de Washington: ¡Vergüenza debería darles a todos!, ¡Alto al fuego ya!, ¡Salven a los niños de Gaza!, mientras el secretario de Estado, Antony Blinken y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, pedían que Estados Unidos enviara de inmediato a Israel y Ucrania 105 mil millones de dólares en ayuda para la guerra.

El primer ministro israelí, responsable de la masacre en Gaza, Benjamin Netanyahu, calificó de “horrendas” las protestas pro palestinas en las universidades estadounidenses y pidió al gobierno de Biden que sean “detenidas”. Comparó la insurrección pacífica de los estudiantes con lo ocurrido en la Alemania nazi en 1930.

“Lo que ocurre en los campus universitarios estadounidenses es horrendo. Turbas antisemitas se apoderaron de las principales universidades. Esas manifestaciones llaman a la destrucción de Israel, atacan a estudiantes judíos, atacan a profesores judíos, recuerdan lo que ocurría en las universidades alemanas. Es algo inadmisible. “, declaró en un comunicado.

Lo que no es horrendo para Netanyahu, es la masacre de palestinos que todos los días ordena con bombardeos indiscriminados sobre Franja de Gaza, Rafá y otras zonas de asentamientos del pueblo palestino. En octubre del año pasado, el ministro llamó a una “guerra santa” de aniquilación contra el pueblo palestino, después de apelar a Amalek, nación de la Biblia hebrea que ordenó a los israelitas un acto de venganza.

“Ustedes deben recordar lo que los amalecitas les hicieron, según nuestra sagrada Biblia. Ahora vayan y hiéranlos y destruyan absolutamente todo lo que tengan y no los perdonen, pero mátenlos, tanto a hombres como a mujeres, infantes y lactantes, bueyes y ovejas, camellos y burros”, afirmó Netanyahu al citar a Samuel 15:3 en un discurso.

La guerra en Gaza estalló el 7 de octubre del año pasado, cuando el grupo Hamas asesinó a varias personas y secuestró a 250 en el sur de Israel. En respuesta, Israel lanzó una operación militar que hasta ahora ha dejado como saldo más 34 mil 262 muertos, en su mayoría civiles, en su inmensa mayoría mujeres niños y niñas, aunado a miles de huérfanos, heridos y lisiados, con territorios arrebatados, con miles de casas destruidas, hospitales derrumbados, cero acceso a salud, agua y materiales de curación, campamentos de refugiados bombardeados, irrigación destruida, drenajes desbordados, campos de olivos y cosechas incendiadas y centenarios árboles talados, caminos-trampas, emboscadas abiertas y cínicas, costas de refugio último con las mayores carencias y el estruendo precipitar de bombardeos constantes.

Y las empresas israelíes a nivel mundial siguen gozando de sus negocios, las armas y la vigilancia, el espionaje y las tecnologías del control social, los alimentos, las armas, los entrenamientos, los medios masivos, entre muchos otros.

Desde la agresión contra el pueblo palestino, se han registrado cientos de protestas masivas en todo el mundo: Madrid, Valencia, París, Roma, Berlín, Varsovia, La Haya, Chicago, Toronto, Casablanca, Quetta e Islamabad, Beirut, Francia, Inglaterra y otros. La única respuesta del gobierno israelí al reclamo de paz ha sido la indiferencia y la represión.

En noviembre pasado, la Organización de Naciones Unidas advirtió que Gaza enfrentaba un grave riesgo de genocidio y que para evitarlo “el tiempo se acaba”, pero el gobierno de Estados Unidos negaba que los bombardeos contra el pueblo representaran una violación al derecho internacional.

La saña de Israel no encontró límites en los bombardeos indiscriminados a departamentos, hospitales, parques públicos y ambulancias, con la intención de crear terror en una guerra genocida contra el pueblo indefenso. Muertos, heridos y desaparecidos entre los escombros marcan el panorama horrendo de la barbarie contra los palestinos. Los niños, las víctimas más vulnerables de la guerra, pidieron al mundo un alto al fuego y ni eso escucharon.

El primero de abril pasado, el ejército israelí asesinó a siete trabajadores humanitarios del único equipo solidario que se atrevió a romper el bloqueo en la franja de Gaza a través de un puente humanitario, para llevar alimentos a la población en medio de la catástrofe y hambruna.

Ni la ofensiva militar de Irán impidió a Israel seguir con su proyecto genocida. Como sabemos, Irán lanzó 185 aviones no tripulados (drones), 36 misiles de crucero y 110 misiles tierra-tierra contra Israel en represalia contra el ataque a su consulado en Siria el primero de abril, lo que dejó como saldo 16 muertos. Una operación sin precedente que acerca a Medio Oriente a una guerra regional.

La guerra contra Palestina sigue despertando el repudio mundial contra el imperialismo criminal que sostiene y apoya al gobierno israelí. Sólo la sociedad organizada pondrá un alto al genocidio contra el pueblo hermano de Palestina. En México se mantienen las movilizaciones, esfuerzos colectivos en cientos de plazas y escuelas, en colectivos, editoriales, mercados, calles, foros, …

Por eso nuestro humilde aporte para las mujeres, niñas, niños, hombres y ancianos, trabajadores de esas hermanas tierras lleva el grito

¡Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá!

Efemérides…

Nosotros no olvidamos la represión llevada a cabo en San Salvador Atenco, el 3 de mayo de 2006. No olvidamos que también en mayo de 2008 se inauguró el Parque de la Memoria en Sartaguda, testigo sólido e inalterable que no permite a la humanidad olvidar lo que son capaces de hacer las dictaduras en cualquier parte del mundo. En ese parque se encuentran esculturas con 3 mil 444 nombres de víctimas entre vecinos fusilados en sus pueblos, otros muertos en campos de concentración, más los que perdieron la vida en los trabajos forzados impuestos como castigo por la dictadura militar.

En mayo no olvidamos el día 26 de 1983, con la perdida de nuestros compañeros Mario y Ruth.  Ni el dolor de todas las madres que gritan cada vez más fuerte ¡Vivos los llevaron! ¡Vivos los Queremos!

Y el día 10… no olvidamos en su aniversario de nacimiento, al compañero Ismael (Gonzalo), que comentan los compañeros realizó aportes muy importantes en lo ideológico y lo político a la organización Fuerzas de Liberación Nacional, y sobre todo, aportes en el aspecto orgánico… con su vida y su ejemplo ayudó a fincar la unidad organizativa.

Reproducimos aquí una parte del Editorial del Nepantla 12, (1980)

“Compañero Ismael: Ejemplo de Revolucionarios”

“Gonzalo (Ismael) es el mejor ejemplo de cómo pueden conjuntarse: la disciplina, responsabilidad y decisión que deben tener los “militares por consciencia” como menciona uno de nuestros comunicados, con la pasión por el estudio de la ciencia marxista, único camino por el que se llega a ser un cuadro revolucionario completo. Teoría y práctica unidas en la lucha diaria. Sólo así podremos realizar nuestra revolución socialista.

(…)

Voy a narrar algunos de los trabajos que Gonzalo realizó como militante profesional de marzo de 1976 a agosto de 1980. Transcurren los primeros meses de su militancia profesional aprendiendo a realizar trabajos manuales sencillos, pero de enorme responsabilidad: aprender mecánica, envasar y empacar objetos que eran enviados a la sierra, asear y cuidar la casa, aprender a preparar los alimentos diarios… Estos trabajos generalmente llevan todo el día. Entonces Gonzalo obtiene permiso para estudiar marxismo después de realizarlos. Iniciaba sus estudios a las 23 hrs y un  los terminaba a las dos o tres de la mañana. Esta actitud de Gonzalo hacia el estudio del marxismo hizo que se fijaran horas más adecuadas para el estudio de los clásicos, como parte de los trabajos diarios, partiendo de una mejor planificación.  (…) Luego se inicia en la fabricación de botas y en la práctica de soldadura autógena.

(…)

A partir de 1977 es entrenado para servir como enlace entre el grupo de la sierra y las ciudades. Pronto conoció los pueblos, los caminos carreteros lodosos, los escondrijos que sirven como punto de contacto, las señales secretas, las claves; aprendió a disfrazarse para pasar desapercibido en los pueblos. Llegado el tiempo de cumplir con sus nuevas tareas, no hubo un solo motivo de queja de su trabajo, los caminos lodosos no lo detuvieron, a pesar de las distancias, los horarios se cumplieron, los objetos transportados llegaron a su destino, haciendo posible así una importante etapa de nuestra lucha.

En marzo de 1977, cuando transportábamos a nuestro inolvidable Co. Alfredo herido de muerte, nos acompañaba Gonzalo. Cuando el corazón de Alfredo se detuvo para siempre, Gonzalo con sus manos y un machete horadó el lecho donde colocamos el cuerpo de Alfredo. A raíz de esta pérdida, un grupo de compañeros profesionales decidió separarse de nuestra organización, invitando a Gonzalo a acompañarlos; pero no sólo se negó a hacerlo, sino que condenó la actitud separatista.

Meses después acepta su primer trabajo de dirección y pasa a ser responsable de una red local. Cambia ahí su nombre por el de Ismael. Inicia su preparación para integrar un segundo grupo exploratorio en la selva. A mediados de 1978 parta para allá. Por primera vez desarrolla actividades de guerrillero rural. Esta prueba que ha desanimado a muchos militantes de origen citadino, es soportada por Ismael a pesar de que una vieja lesión que tenía en un tobillo le impedía caminar con soltura. A su regreso, Ismael es nombrado miembro del Buró Político y responsable de una Zona que comprendía varias ciudades. En 1979 se inicia la producción de nuestro periódico interno NEPANTLA, trabajo en el que tuvo destacada actuación. En 1980 acepta formar parte de la Dirección Nacional e inicia su periodo de entrenamiento. Esta nueva responsabilidad lo lleva a viajar por todos los rincones de nuestro país, conduciendo su vehículo (a veces solo), miles de kilómetros; no hubo JAMAS una falla, ningún accidente, ni siquiera leve; jamás hubo una palabra que externara cansancio. Ismael era, para entonces, el compañero mejor desarrollado militar y políticamente de nuestra organización. Nunca abandonó sus estudios de marxismo, en la ciudad, en el monte, en sus viajes, llevó siempre sus libros. Buscar el apoyo y la coordinación de todos los revolucionarios conscientes de nuestro pueblo, fue la última comisión encomendada a Ismael; sólo la muerte podía separarlo de su objetivo.

Gonzalo-Ismael cayó cumpliendo con su deber.

¡Vivió por la Patria! ¡Murió por la Libertad!”.




Abril 2024, mes de luchas y unidad

Como lo hacemos cada mes, en abril recordamos a los compañeros que cumplían años en algún abril… como son la compañera Soledad, asesinada en San Miguel Nepantla, Estado de México y los compañeros Ricardo y Fidelino, desaparecidos en el mismo año de 1974 en la Laguna del Ocotal, Chiapas.

También recordamos con entrañable cariño, a la compañera y luchadora social Doña Rosario Ibarra de Piedra, quien “se nos adelantó” en abril 16, ya hace 2 años. Estaría triste de ver cómo a las Comisiones de búsqueda de desaparecidos, con nombres cortos y largos de sexenios anteriores, se suma una más, la llamada “Comisión de verdad y justicia” que, a según “diferente” a las anteriores, iba a dar razón de nuestros desaparecidos políticos y al cabo de este sexenio dizque “diferente”, hizo lo mismo: no hacer nada, y trajo a los familiares de los desaparecidos de dependencia en dependencia, de reuniones privadas a públicas, de oficinas de organizaciones de derechos humanos, chicas, medianas y grandes, de pláticas con funcionarios de todos los tamaños, en un lado y en otro, de defensores de derechos humanos a periodistas dizque comprometidos haciendo entrevistas; en fin, diría ella –del tingo al tango-.  Y con su ejemplar trabajo cientos y miles aprendimos la justeza de su lucha y nos sumamos al reclamo de…

¡Vivos se los llevaron!,!Vivos los queremos!

Además, y algo muy grave, es que el Estado adoptó la política de desaparecer a los desaparecidos, al reducir la lista de las víctimas y pensar que con ésta medida engaña a los familiares.

También en abril, hace 39 años, el estado mexicano, la Dirección Federal de Seguridad, “desaparece” al hijo de Doña Rosario, Jesús Piedra Ibarra, con lo que ella empieza el peregrinar y va encontrando a más y más madres buscando a sus hijas e hijos, con lo que el número de madres y familias siguió creciendo hasta conformar el Comité Pro Defensa de Presos, Perseguidos, Desaparecidos y Exiliados Políticos, Eureka. Recordamos que, en su momento, Doña Rosario exigió a López Obrador hacer realidad el reclamo de encontrar a los desaparecidos al entregarle la medalla Belisario Domínguez, su silencio ante esta solicitud, a la fecha, no ha tenido respuesta…

“No quiero que mi lucha quede inconclusa. Es por eso que dejo en tus manos la custodia de tan preciado reconocimiento y te pido que me la devuelvas junto con la verdad sobre el paradero de nuestros queridos y añorados hijos y familiares”.

Rosario Ibarra de Piedra

Y entre sus pendientes, también le esta quedado sin resolver la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, a escasos meses de terminar el mandato de la Cuarta Transformación, que mantiene intocable al ejército.

Los fuegos y las aguas

Las montañas de México se incendian, la temperatura política aumenta y no solamente por los tiempos electorales o por que la derecha actúe, sino sobre todo porque desde abajo surgen e insurgen las demandas de siempre, ahora no sólo incumplidas por promesas electoreras de, esas sí, politiquerías que sólo llevan a ocupar puestos y presupuestos y claro, no son ni conservadoras ni de derecha, ni están por intereses; son demandas que en cualquier lugar del mundo, aquí y en China, son derechos y demandas fundamentales para los pueblos y los trabajadores.

Poco o nada ha variado con el cambio de color de la administración, que no de régimen, y mucho menos de sistema capitalista, de modelo neoliberal, pues ni siquiera las astillas más filosas del neoliberalismo se han podido limar, ni el 90% de las promesas. Todo apunta a la continuidad del desarrollismo entreguista de territorios y trabajadores de un país colonizado y dependiente, con saqueo y la militarización, con el infame tortuguismo para resolver los gravísimos casos diarios de violación de los derechos humanos y la creciente impunidad acumulada y soportada por comisiones que buscan un salario y no la verdad ni la justicia, la indolencia de la falta de justicia y las complicidades de un régimen corrupto que no acaba de terminar sino que continúa, aunque las editoriales oficiales y centros de supuesta investigación de amigos publiquen sendos textos y pronuncien en grandes foros a modo que el neoliberalismo ya terminó, que vendrá un segundo piso y que estamos casi en la 8T. Asómese a la calle y verá que la policía sigue multando y extorsionando, golpeando y desapareciendo, asesinando, en todo el territorio nacional sea de un color u otro color de gobierno, vea a las mujeres luchar y acuerparse, vea a los pueblos unirse, vea a trabajadores hambrientos y migrantes abandonados, maltratados, extorsionados, vea la realidad y no las cifras que maquillan y blanquean, vea el dolor y no sólo negocios, escuche a los puebles y no sólo las desveladas y adormecidas declaraciones a modo para públicos mancos y miopes que cómodamente escuchan y vuelven a dormir pasada la mañana de 9 a 12.

Los fuegos y las aguas ahora señalan el mar de luchas legítimas que sobreviven acusadas de ser conservadoras o contrarias al color del presupuesto repartido en migajas para disfrazar los verdaderos avances del capitalismo. Esas aguas y esos fuegos llegado el día que se agoten las caridades serán huracanes de movimientos por la liberación de los pueblos a nivel nacional y con horizonte revolucionario. No será un pliego petitorio ni una lista de demandas, sino los pueblos organizados y movilizados para crear un nuevo ciclo de vida, desde las cenizas en las que el país entero ahora se encuentra, aunque estemos al nivel de Dinamarca en salud o que seamos una potencia que baja 10% la paridad del dólar. Y sí hablamos de individuos y proyectos, de proyectos y tendencias, aquí exigimos trabajo y no sólo becas, derechos y no descalificaciones, defensa de territorios y no programas de deuda de semillas y vigilancia de explotación por unos cuantos pesos, empleos serios y no ofertas de policía, guardia o ejército, comunicaciones y no negocios, justicia y no cantaletas de soberbia, proyectos y no individuos ansiosos de poder, principios y no cuotas electorales aliadas a verdugos de ayer y hoy.

Ahora son tiempos de sequía que anuncian fértiles frutos de nuevas y futuras épocas. Son tiempos de organizar y planear, encontrar y seleccionar las mejores semillas que mañana habrán de sembrarse. El tiempo es largo, muy largo y serán muchos los esfuerzos e intentos, abonando las tierras con ideas y trabajos que habrán de cosechar otros en un tiempo futuro que como el horizonte se alcanza a ver, y que quedará en la memoria de los principios y los hechos. Son tiempos de urgente unidad a largo plazo, de necesaria articulación de las luchas, de coordinación y sobre todo de principios.

En ello hay experiencias ejemplares; por ello en abril recordamos las palabras que Francisco Pineda escribiera y presentara el 8 de marzo de 2016, en una de las decenas de exposiciones públicas de sus valiosos trabajos por conocer la historia desde sus propias fuentes y desde el sentido y significado de los propios pueblos.

Aquí presentamos un extracto de una de ellas, pues su palabra continúa entre nosotros:

(…) “El año de 1914, México vivía una situación revolucionaria. Al destrozar al ejército federal y derrocar a Victoriano Huerta, la rebelión cruzó el umbral del antiguo orden y abrió nuevos horizontes”.

(…)

Cuartel General en Tlaltizapán, a 29 de mayo de 1916.

Y la lucha sigue: de un lado, los acaparadores de tierras, los ladrones de montes y aguas, los que todo lo monopolizan, desde el ganado hasta el petróleo. Y del otro, los campesinos despojados de sus heredades, la gran multitud de los que tienen agravios o injusticias que vengar, los que han sido robados en su jornal o en sus intereses, los que fueron arrojados de sus campos y de sus chozas por la codicia del gran señor y que quieren recobrar lo que es suyo, tener un pedazo de tierra que les permita trabajar y vivir como hombres libres, sin capataz y sin amo, sin humillaciones y sin miserias.

Cuando esto se haya logrado, cuando el campesino pueda gritar: “soy hombre libre, no tengo amos, no dependo de nadie más que de mi trabajo”, entonces diremos los revolucionarios que nuestra misión ha concluido, entonces podrá afirmarse que todos los mexicanos tienen Patria, entonces será grande el pueblo, poderosa y respetada la República.

Reforma, Libertad, Justicia y Ley.

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.




Marzo mes de las flores: Dení, Flor en otomí, Soledad, y Murcia… ¡Por siempre en nuestros corazones!

¿qué podemos saber las mujeres sino filosofías de cocina?

Bien dijo Lupercio Leonardo,

que bien se puede filosofar y aderezar la cena.

Y yo suelo decir viendo estas cosillas:

Si Aristóteles hubiera guisado, mucho más hubiera escrito (…)”.

Respuesta a Sor Filotea de la Cruz, 1690. Sor Juana Inés de la Cruz

Marzo ahora se dice por todos los medios de comunicación que es el mes de las mujeres. No hay duda que se ha ganado a pulso y a base de seguir el ejemplo que no debemos olvidar de lo ocurrido en otros marzos… el 8 de marzo de 1857, cuando por primera vez, mujeres que trabajaban en la industria textil en Nueva York organizaron una huelga protestando por sus condiciones laborales. 50 años después, en 1908, 15,000 obreras marcharon en la misma ciudad exigiendo ¡Pan y Rosas! (aumento de salario y mejores condiciones de vida). Para 1909, un año después, también en marzo, trabajadoras textiles (costureras industriales) se habían declarado en huelga. Luchaban por sus condiciones laborales, aumento de salarios, reducción de la jornada laboral a 10 hrs. y fin del trabajo infantil; durante esta huelga pacífica, 129 mujeres murieron calcinadas en la fábrica Cotton Textile Factory, en un incendio provocado por sus dueños los señores Max Blank e Isaac Harris, y es hasta 1910 que Clara Zetkin propuso que se estableciera el 8 de marzo como el Día Internacional de la mujer que lucha, en homenaje a aquellas que llevaron adelante las primeras acciones de mujeres organizadas contra la explotación capitalista. Muy fácil es ahora olvidar su origen y cambiar el sentido de la lucha… de ser producto de una lucha de clases, a solo verla como una lucha de género….

No hay duda que dentro de nuestras luchas debemos sumar una nueva…  una lucha que nos ayude a modificar toda una cultura que se ha venido desarrollando patriarcal y abusiva y no solo eso… agresiva y hasta criminal a más no poder… y debemos librarla, organizarla, practicarla y llevarla adelante… y ya no más permitirla… pero no perdernos en solo practicar lo segundo…. pues la lucha de clases continúa, el capital con sus múltiples rostros y poderes explota a los trabajadores, sin importar géneros

En las FLN, marzo nos llama a recordar a la compañera Anita, joven internacionalista que ayudó a nuestra organización en los difíciles trabajos de los años 70’s y a la compañera Lucha… primer mujer en integrarse a la clandestinidad en esos mismos años.

Junto a ellas, tenemos que recordar al compañero Alfredo, quien muere un 7 de marzo de 1975, producto de un lamentable accidente. Fundador de las FLN, que con su trabajo se destacó como formador moral de la organización. Todos los recordatorios y escritos de compañeros que lo conocieron demuestran la firmeza de sus convicciones. Tocaron a él tiempos muy difíciles como fue la pérdida de los primeros compañeros y el inicio de la búsqueda de los compañeros desaparecidos políticos de la Laguna del Ocotal. La tristeza no le hizo perder lo digno de la lucha.

No hay duda de la firme convicción de Alfredo en cuanto a la seguridad y la confianza que brindó a quienes en esos años convivieron con él para iniciar la difícil búsqueda de los compañeros en la Selva Lacandona, lugar a donde no falló, ni un sólo día en buscarlos, primero en las fechas acordadas y posteriormente de manera permanente. Su ejemplo fue motor para toda la organización de aquellos años para volver a las montañas y buscarlos en cada rincón que se pudiera, al grado tal de continuar la búsqueda en la montaña hasta el último día de su vida.

Compañeras que en esa época mantuvieron viva esa convicción fueron, por un lado, Lucha quien lo acompañó a la montaña en 1976 y después participó en muchísimos trabajos necesarios en aquellos años, así como Aurora, quien también apoyó con esa misma convicción hasta 1975 que es asesinada por el Ejército Federal en Cárdenas, Tabasco.

Ambas compañeras ayudaron sin lugar a dudas, en múltiples tareas, desde el acompañamiento en los viajes, dando vida “de familia” ante el vecindario cuando hacía falta quedar escondidos más de una docena de compañeros en una casa, donde no podían ni asomarse por la ventana. Animando en momentos donde la tristeza y el “temor” normal que se produce cuando te toca vivir momentos de incertidumbre y represión por parte del enemigo, y que puede volverse terror paralizante que te impida conservar la paciencia y la disciplina tan necesaria en momentos como esos.

La compañera Aurora, recabando colaboraciones, dando explicaciones a quienes por temor a la represión era más cómodo y fácil dejar de ayudar en los encargos tan necesarios en esos momentos, donde una lata de sardina servía de plato y las puertas de los closets servían de “cama” para aislar un poco el cuerpo del frío de los mosaicos a la hora de dormir.

Se podrían enumerar un sinfín de situaciones que se vivieron… pero la mística que Alfredo pregonaba y que las compañeras multiplicaban… tuvo mucho que ver en la manera de salir adelante en aquellas difíciles situaciones.

Otra compañera que enfrentó con éxito la soledad de la cárcel fue la compañera Elisa, después de la detención, los interrogatorios y la tortura, quedar “sola” en la cárcel… también requirió de convicción y firmeza revolucionaria. Valores que no se aprenden en ningún libro… solo los procesos revolucionarios te brindan la oportunidad de vivirlos y aprenderlos en su entera dimensión.

Por todos esos aprendizajes… bien decía el compañero Alfredo parafraseando a Martí… refiriéndose a los “retoños” de color verde-nuevo, que nacen de un tronco podrido, “eso somos o aspiramos a ser nosotros… los retoños de la vieja sociedad”, y tenemos muchas cosas que aprender.

En este 8 de marzo histórico y de lucha, nombramos a nuestras compañeras, las que nos precedieron con su ejemplo, determinación y valentía, a todas las mujeres que se organizan y luchan, que resisten, defienden y construyen vida. Desde el río hasta el mar, abrazamos la lucha de liberación en las tierras palestinas, sea hoy, nuestra respiración y latido para nombrar a las miles de mujeres y niñas que están resistiendo por su vida, por la vida toda, como ayer y por el mañana. Luchamos por la liberación de todos los pueblos de la tierra madre, compañeras, mujeres, hermanas, camaradas, hijas, madres, trabajadoras, todas las mujeres revolucionarias, abrazamos sus luchas, y junto con ellas seguimos llamando a todo ser humano que haga suyos estos ideales revolucionarios en cualquier país… es decir, a ¡Vivir por la patria! o ¡Morir por la libertad!

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.




Nepantla y la Laguna del Ocotal… ¡50 Años!

Editorial Febrero, 2024.

A partir de 1979… se reconoce el día 14 de febrero como el día en que se honra la memoria de los compañeros de las Fuerzas de Liberación Nacional, caídos o desaparecidos a lo largo de los diferentes años.

En el Periódico Nepantla, Órgano de Comunicación Interna de las FLN, Año 1, No. 1 del 14 de febrero de 1979, en el artículo titulado Nepantla: Un lustro, al final en la página 2, se escribió:

“Eventualmente, podrán vencernos… pero no podrán ni terminar con las causas del descontento popular, ni detener la marcha de la historia.

Por ello en este mes de febrero y particularmente los días 14, rendimos homenaje, a los compañeros que, en distintas fechas y lugares, han caído cumpliendo su deber revolucionario.

  ¡Compañeras y compañeros…!

¡P r e s e n t e!

En febrero también recordamos los cumpleaños de dos compañeros que nos acompañaron por muchos años de represión y persecución y que nos dejaron su ejemplo de lucha, la coherencia de sus hechos, la tenacidad en su actuar…  la entrañable compañera Doña Rosario Ibarra de Piedra y nuestro querido compañero Romeo, padre de nuestro primer responsable histórico y fundador de la organización el Cro. César “Manuel”.

                           

En este 50 Aniversario, vamos a presentar una Edición Especial, que trata sobre los acontecimientos en San Miguel Nepantla y la Laguna del Ocotal en1974. Aquí presentamos lo que será su…

Prólogo

“El texto que a continuación presentamos es un relato de uno de los episodios más emblemáticos y paradójicamente más desconocidos de la historia reciente de la lucha por la liberación de los pueblos y los trabajadores en México, América Latina y el mundo.

Hace 50 años en las montañas del sureste mexicano en una de las regiones más selváticas de Mesoamérica se desencadenó un proceso de lucha cuyas magnitudes se conocieron públicamente la noche del 31 de diciembre de 1993 y la madrugada del 1 de enero de 1994.

Desde 1969 cuando se fundaron las FLN se desarrollaron multitud de trabajos paso a paso, hilo a hilo, tornillo a tornillo, palabra a palabra, pueblo a pueblo. Los documentos revelan el carácter de nuevo tipo, los métodos la ética, la paciencia, la disciplina, el respeto, el secreto, todo eso impulsaron los compañeros fundadores junto con la experiencia de lucha de los pueblos indígenas y la experiencia de los trabajadores, organizados en el conjunto de las Fuerzas de Liberación Nacional con un ejército del pueblo, soldados por conciencia que aprendieron y enseñaron los secretos de la insurgencia continuada en el complejísimo y sencillo arte de insurrección entre las partes que integran la lucha grande.

En el año 1971, el 19 de julio, al tiempo de intensas movilizaciones sociales y represiones se desencadenó un primer enfrentamiento, conocido como el bautizo de fuego en Monterrey Nuevo León. Iniciando el año de 1974 en un convulso país y con la emergencia de movimientos de trabajadores, obreros, estudiantes, pueblos indígenas, exilios masivos latinoamericanos, luchas de mujeres, maestros, campesinos, se desarrolló una serie de operativos que culminaron en crímenes de Estado hacia las organizaciones insurgentes.

Entre los primeros y últimos días de febrero de aquel año se descubrió, por traición y delación, una serie de lugares de una organización revolucionaria de nuevo tipo bajo la estrategia de la acumulación de fuerzas en silencio. El operativo inició en Monterrey, desde el día 12 de febrero que detuvieron a miembros de las FLN; continuó en Nepantla en el Estado de México con la delación de ellos sobre la Casa Grande de Nepantla, derivando en el asesinato de cinco miembros de las FLN y la detención de dos más, el aseguramiento de documentos y derivado de ello se desarrolló la incursión militar en Ocosingo, en la selva Lacandona en Chiapas en particular en el rancho el Chilar y en la Laguna del Ocotal donde continuaron los combates y se inició la detención y desaparición forzada de 6 compañeros y 1 compañera por el Estado mexicano.

Este libro tratará de relatar las formas en las que el Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata enfrentaría esa represión, expulsaría a la base militar secreta estadounidense posicionada en la laguna y desarrollaría una política de resistencia y reorganización. Retomamos una serie de comunicados, documentos e investigaciones que desde siempre han sido parte del archivo interno, algunos publicados en la página web, otros testimonios directos. Todo ello demuestra la búsqueda permanente para saber lo ocurrido con los compañeros y para conocer las historias desde sus propias fuentes, no desde falsos informes gubernamentales que maquillan o enturbian los hechos.

Queremos también señalar la importancia de los acontecimientos como una razón de militancia real y comprometida, como búsqueda de vida mejor para todos y todas, no como muerte de olvido, no como vida plena individualista a costa de los otros sino ofrecer la vida para que otras niñas y niños puedan nacer libres, sin explotación, sin racismo, sin despojo de sus territorios.

A decir de las publicaciones en el año 2014 se señala:

“La noche del 14 de febrero de 1974, en un operativo policiaco-militar desproporcionado, el gobierno de Luis Echeverría Álvarez atacó la Casa Grande de las Fuerzas de Liberación Nacional (FLN), localizada en el poblado de San Miguel Nepantla, Estado de México. Sin mediar aviso, un batallón del ejército mexicano y la Dirección Federal de Seguridad (DFS) bajo el mando de Miguel Nazar Haro, guiados por la traición, dispararon y exigieron la rendición de siete militantes de las FLN que ahí se encontraban.

(…)

A esos hechos siguió el operativo en el Chilar, en Ocosingo, en la zona de Montes Azules de la Selva Lacandona en Chiapas, donde los integrantes del Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata recibieron la noticia de Nepantla, disponiéndose a evacuar la zona no sin antes expulsar a los estadounidenses que se encontraban en las inmediaciones de la Laguna del Ocotal, entrando en combate y replegándose los 7 de Ocosingo a la selva.

En la Lacandona en comunidades tzeltales, tzotziles, choles y lacandonas las y los compañeros encontraron refugio y no pocas veces la protección de los pueblos, sin embargo, el terror del Estado orilló a la entrega de información de manera forzada por parte de campesinos, siendo los compañeros desaparecidos por el ejército en un operativo que duró varias semanas.

En estas páginas encontrarás lo que hasta ahora sabemos. Evidentemente el mal gobierno tiene otra versión y tiene además los informes que no han querido publicar ni delegar las responsabilidades sobre militares, jueces, policías, funcionarios y demás involucrados. Otros podrán desvirtuar los hechos bajo el conformismo y la cobardía de descalificar o de llamarlos aventureros, sin considerar los años que fueron de intensos preparativos, sigiloso entrenamiento, congruencia y consecuencia de las ideas en los hechos, otros dirán con pereza, ingenuidad o mala intención que están muertos algunos, señalarán que fue pasado remoto por ser contrario a las modas que se padecieron y aún padecen a cambio de fama y privilegios , otros y otras intentarán voltear la mirada, pero muchos otros y otras se detendrán a observar con respeto y aprecio, valorarán lo que significó para la zona, la región, el país y el mundo ese acto de congruencia, antes de ser reprimidos luchar, antes que caer, ir a expulsar a los gringos, antes que rendirse pelear, antes que traicionar luchar, no claudicar ni venderse, ser ejemplares.

50 años después, este texto muestra el recorrido de los hechos, basados en los documentos, en la historia, desde las propias fuentes y no de informes terceros o policíacos, acompañado de textos de análisis del contexto nacional e internacional para que las nuevas generaciones tengan el panorama completo de la realidad que se ha vivido y luchado, los hechos que sentaron las bases éticas, políticas, prácticas e ideológicas de continuidad de las luchas de liberación y de inicio de las luchas de nuevo tipo en México.”

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos

¡Vivir por la Patria! o ¡Morir por la Libertad!

Febrero, 2024




1993-2023 – 30 años

Recibimos documento del Comité Central del Partido Fuerzas de Liberación Nacional, que transcribimos íntegro como Editorial de Enero del año 2024.

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.

Editorial Enero, 2024

“1993-2023: 30 años”

En ésta misma página –años atrás- escribimos que en nuestro país, el 1º de enero de 1994 “se enfrentaron dos visiones de sociedad. Por un lado, un octogenario y caduco sistema de múltiples partidos y fuerzas políticas que ha ofrecido y aplicado una política de pobreza para la mayoría, sostenido por la militarización de la sociedad que por décadas sólo ha producido miedo, muertes, torturas y desapariciones forzadas de nuestros hermanos mexicanos”, y por el otro lado, estábamos “quienes por convicción aspiramos a una sociedad incluyente -en más de un sentido-“, y que buscaba la reconstrucción del país para que éste despertara del “letargo” en que se encontraba.

Este enfrentamiento político, y desde luego militar, quedó sin resolver y es una tarea revolucionaria pendiente que nos ocupa día tras día. Muchas cosas de la política mexicana han cambiado a partir de esa fecha, pues el levantamiento ayudó, sin duda alguna, no sólo a visibilizar el olvido en que se encontraban los indígenas y otros sectores y clases de todo el país, sino también a poner al descubierto y a la defensiva a un sistema de gobierno caduco.

Es importante recordar, que a finales de enero de 1993, delegados y delegadas de todo el país, provenientes de comunidades rurales y urbanas (electos en sus propios colectivos), convocados por la Dirección Nacional de las FLN, conformaron la Asamblea del Primer Congreso de la organización ahora ya transformada en un Partido Revolucionario. Éste se realizó en un pueblo de la cañada marcada por el imprescindible Rio Jataté en Chiapas, y por unanimidad, después de valoraciones políticas, económicas e históricas, el Partido Fuerzas de Liberación Nacional decidió el inicio de la guerra y ordenó a todas las estructuras partidistas prepararse para ella.

Este levantamiento de pueblos, comunidades y militantes organizados era resultado de la acumulación de 25 años de trabajos político-militares en todo el país; desde la creación de una estructura clandestina nacional con participación sustancial de militantes profesionales y urbanos (cuadros del partido), al establecimiento de redes de avituallamiento, la creación de frentes de combates en diferentes partes del país y la instalación de talleres de imprenta, armería, costura y salud a través del esfuerzo y la participación de las y los militantes de las FLN.  También creamos organizaciones intermedias de obreros, campesinos, mujeres y maestros, entre otras.

El avance de la estrategia revolucionaria era evidente, aún a costa de diferentes episodios donde perdimos a valiosos compañeros y compañeras, como también propiedades, armas, vehículos (1971, 1974, 1977, 1980 y 1983).

Muchos trabajos revolucionarios del PFLN y situaciones históricas tuvieron que pasar para crear las condiciones políticas, militares, estratégicas y tácticas para que el levantamiento fuese posible, pero hay personajes que dicen que lo sucesos ocurridos ese 31 de diciembre de 1993, hace 30 años, fue resultado de esfuerzos espontáneos, sólo de trabajos regionales y locales, o sólo de nuestros compañeros de las comunidades indígenas en el sureste mexicano, o sólo de la labor realizada en unos cuantos años, o sólo hecho por algunos superhombres. ¡Ellos mienten!

Esta “distorsión intencional” niega lo evidente: que sólo una organización revolucionaria nacional con décadas de esfuerzos revolucionarios clandestinos, colectivos y disciplinados, fue la responsable, con errores y aciertos, de lo sucedido hace 30 años. Además, erróneamente, esa distorsión forzó una narrativa de que sólo era una guerra contra el olvido de las comunidades indígenas mexicanas, cuando en realidad fue el inicio de una lucha de liberación nacional de y para todos los sectores de trabajadores y clases sociales mexicanas explotadas y marginadas. Todo esto lo pueden encontrar en los Cuadernos de Trabajo “Dignificar la Historia” publicados por la Editorial Casa de Todas y Todos, en donde nuestra organización transparentó e hizo público parte del archivo histórico.  

A 30 años de distancia de ese suceso, que ahora es parte de la historia de México, es necesario hacer algunas reflexiones sobre el impacto, implicaciones y lecciones de las decisiones y acciones tomadas por la Asamblea de Delegados del Partido Fuerzas de Liberación Nacional, sobre todo para tratar de entender lo que sigue en esta lucha por un cambio revolucionario en México.

Primero. Que el objetivo político primario del levantamiento armado del PFLN era, -y sigue siendo- inspirar y “contagiar” a todos los sectores explotados, marginados y olvidados de TODO México, a integrarse a un movimiento revolucionario amplio que llevase al cambio radical de las relaciones de clase y de poder, y con ello construir una sociedad mexicana justa, igualitaria, y democrática donde los valores de desarrollo económico, social, político, cultural e ideológico fueran marcados por el bien común y no por los deseos del capital nacional o imperial.

Segundo. Que si bien era cierto que el levantamiento en ese momento fue evidentemente armado, con la toma de pueblos y cabeceras municipales en el sureste y otras acciones en el centro y norte del país –como labores de distracción-, el llamado del PFLN era sobre todo político-organizativo, donde la apuesta era que otros sectores se integraran a construir con múltiples formas de lucha y de organización al movimiento que empezaba (huelgas, paros, marchas, rebeliones y resistencias).

Tercero. Las y los militantes del PFLN teníamos muy claro y estábamos conscientes, que la etapa de lucha que iniciaba el 31 de diciembre de 1993 sería larga y difícil, en donde dejaríamos lo mejor de nuestro ser revolucionario, y que muchos no veríamos el resultado de tales decisiones y acciones. Que lo que comenzaba en esos días tendría que ser continuado y concluido por otras generaciones de jóvenes revolucionarios mexicanos.

Este 2024 es nuestro deber recordar, como cada año, a nuestras compañeras y compañeros caídos, heridos, torturados y presos por décadas de antes y después de 1994. En el año 2004 se dio a conocer la lista oficial de 46 compañeros caídos en los combates de 1994; entre ellos, Francisco Gómez Hernández, Compañero Comandante Hugo, y el Co. Subcomandante Insurgente Pedro, militante de las FLN desde 1979, consciente siempre de su actuar hasta el día de su muerte. 

Nuestra lucha no se detuvo; en los hechos, la Declaración de Guerra hecha al poder ejecutivo y al ejército del estado mexicano, aprobada un año antes por los compañeros en el Primer Congreso del PFLN, se inició el 1 de enero de 1994 y sigue en pie.

Con estas y quizás otras valoraciones y reflexiones no escritas o dichas, las y los actuales militantes del Partido Fuerzas de Liberación Nacional no vemos el aniversario de los 30 años del levantamiento revolucionario como una mera fecha de celebración, –lo cual sin duda haremos-, sino como un momento de reafirmación de nuestro compromiso de lucha revolucionaria, un recordatorio de la responsabilidad política y moral que nos dejaron nuestros compañeros y compañeras caídas o desaparecidas, y de no olvidar que hoy, 31 de diciembre de 2023,  30 años después, la lucha por la liberación nacional y el cambio social sigue, aun con más fuerza e intensidad y la invitación a todas y todos, es a retomar la frase que siempre ha dado sentido político al levantamiento armado de aquel primero de enero: ¡YA BASTA!.

31 de diciembre del 2023

¡Vivir por la Patria! o ¡Morir por la Libertad!

Partido Fuerzas de Liberación Nacional




“30 Aniversario”

Editorial Diciembre, 2023

En la imágen, Cra. Rosita y Cra. Murcia.

Con más de 50 años a cuestas, hoy nos toca escribir ésta efemérides de cierre de año. Normalmente se hace un recuento de lo vivido en estos 12 meses, pero el próximo año será especial, ya que celebraremos los 50 años de la expulsión de los extranjeros acampamentados en la ribera norte de la Laguna del Ocotal, en el municipio de Ocosingo Chiapas, en el año 1974. Dichos espías se entrenaban en sobrevivencia en terrenos selváticos, y fueron expulsados por nuestros compañeros. Es quizá, uno de los últimos acontecimientos históricos frente al intervencionismo en México, y debe ser conocido como un acto patriótico.  Si las condiciones lo permiten, el próximo año develaremos un monumento histórico que señale el sitio y los nombres de nuestros compañeros.

Hoy recordaremos el nacimiento de 2 compañeras que nos ayudaron con sus vidas incansables y fecundas a salir adelante desde los primeros días de lucha clandestina, se trata de la compañera Murcia, primer compañera en ser reclutada, y la compañera Rosita, que representaba el cariño de la madre mexicana a sus hijos, que en esos tiempos eran los integrantes del núcleo guerrillero, también en diciembre era el cumpleaños del compañero Gonzalo, fundador de nuestra organización en 1969, y como notas tristes, es en diciembre el mes del fallecimiento por causas naturales de nuestra compañera Camelia, que por muchos años fue el enlace por internet de todos ustedes, y de otra querida compañera que falleció en diciembre fue María Jiménez, activista avecindada en los Estados Unidos, vaya a todas y todos estos compañeros, nuestro respeto.

Sobre recordar a nuestros compañeros caídos o desaparecidos, decía Mario, “Mario grande” en 1980 … ….”su ausencia es presencia; los compañeros caídos –o desaparecidos– representan ahora un factor de unidad; son el lazo que nos liga con el pasado, con la historia de la organización, son el acicate que nos impulsa al futuro tomando su ejemplo para continuar la obra que ellos impulsaron y que no pudieron ver avanzar por haber sacrificado su existencia para que ella, la organización, viviera”.

Son compañeros que se destacaron por su honradez, sencillez, modestia, disciplina y gran espíritu de trabajo.

Para entender lo que se vivía en cuanto a la represión en México presentamos escrito en X (antes twiter) de la historiadora Adela Cedillo, de una investigación que hizo en torno a la inhumación de nuestros compañeros, asesinados en Nepantla, México en 1974.

Por último, incluimos la fotografía del yate Granma, con el cual se inicia la liberación de Cuba por los guerrilleros encabezados por el comandante Fidel Castro el 2 de diciembre de l956.

¡Patria o Muerte!, Venceremos.

“En este hilo voy a narrar la historia de cómo encontré los registros de cinco personas desaparecidas por el ejército en el panteón civil de Dolores de la CDMX. Sus nombres: Dení Prieto Stock, Carmen Ponce Custodio, Anselmo Ríos Ríos, Mario Sánchez Acosta y Alfredo Zárate Mota.

Se trataba de guerrilleros pertenecientes a las Fuerzas de Liberación Nacional, que vivían en una casa de seguridad en Nepantla, Edomex. La casa fue entregada bajo terribles torturas por los también militantes Napoleón Glockner y Nora Rivera.

El ejército tomó la casa de Nepantla haciendo uso desmedido de la fuerza. Acá hay una descripción completa de la masacre que tuvo lugar el 14 de febrero de 1974:

https://www.laguerrasuciamx.com/2009/02/nepantla-35-anos-de-olvido-y-silencio.html

La primera persona que entrevisté al respecto en 2003 fue Luis Prieto, tío de Dení. Él me contó que un día de 1981 le llegó un oficio diciéndole que fuera a recoger los restos de su sobrina en el panteón Dolores porque ya los iban a remover. Él logró hallar la tumba y los restos.

Me dijo que sabía que eran los huesos de Dení porque eran de estatura pequeña y todavía tenían cabello, que correspondía con su color. Sin embargo, la tumba no tenía nombre, ¿cómo pudo llegar a ella? No lo recordaba.

Cuando fui al panteón Dolores pedí los registros de los sepultados el 15 de febrero de 1974 pero para mi sorpresa alguien había arrancado esa hoja. El empleado del panteón me dijo que tal vez estarían en un libro que llaman “el burro” donde se registraban todos los ingresos.

Bingo! Si, ahí estaban los registros del 15 de febrero de dos mujeres y tres hombres enterrados como desconocidos en cajas de corte en una parte del cementerio muy recóndita. Esto profundizó el misterio. Si nadie sabía sus nombres, ¿cómo es que Luis Prieto pudo llegar a Dení?

Era imposible que alguien del panteón le mandara un oficio y además aquella parte del cementerio era usada exclusivamente para los cuerpos sin reclamar. Alguien del gobierno tuvo que haberle revelado a Luis la verdad y él quizá ocultó su identidad para protegerle de represalias.

Le pedí a un panteonero que me llevara a donde estaban esos restos. La ubicación exacta de las fosas era: 5ª clase, lote 53, línea 11, sepulcros 8, 16 y 17 para los hombres, y 14 y 11 para las mujeres. Yo sabía que tres osamentas debían seguir ahí, pero no las de Alfredo y Dení.

Alfredo Zárate había tenido un amigo que trabajaba en el gobierno del Distrito Federal sólo por esa conexión su familia pudo recuperar sus restos del panteón Dolores, en circunstancias muy dramáticas, intimidados por Miguel Nazar Haro.

El panteonero y yo recorrimos el terreno de la quinta clase alrededor de 45 minutos. Él llevaba décadas trabajando en el lugar. Era una zona muy descuidada que parecía casi un basurero. Me encontré un monedero que tenía 50 pesos y se lo di al panteonero. Él me dijo “aquí es”.

Esto lo narro porque son el tipo de cosas que a uno como escéptico le ponen los pelos de punta. Incrédula le dije –¿Aquí es qué? El lote 53. ¿Está seguro? Sí, aquí es. Pero no van a poder sacar las cajas. Aquí echaron mucho cascajo del temblor del ’85, incluso vigas y trabes.

Perturbada por la escena, le dije que si conocía a otro panteonero al que al que le hubiera tocado estar desde aquellos años y por fortuna sí lo conocía y lo fuimos a buscar a la entrada. Este panteonero también me sumergió en una escena surrealista. Él dijo que se acordaba de ese caso.

Según el, dos mujeres blancas de clase acomodada, madre e hija, iban a visitar las tumbas de las que le pregunté, dejaban flores y a veces le hacían la plática. No muy segura de que se tratara del mismo caso, quise averiguar si sabía más detalles. Lo único que me confirmó es que, en efecto, el ejército había enterrado ahí los cadáveres. No recordaba nada más o no me quiso decir más. Yo tenía contacto con las familias y quise hacer gestiones para recuperar los cuerpos, pero en el panteón me dijeron que era imposible por el tiempo transcurrido y por el lugar.

En aquellos años estaba activa la Fiscalía Especial, pero desgraciadamente el titular era Ignacio Carrillo Prieto, quien por su parentesco con Dení se abstuvo de investigar su caso. Fue una cosa terrible para una masacre que podía documentarse perfectamente y llevarse a juicio.

Le comenté a mis conocidos del Comité ’68 mis hallazgos. Ellos habían demandado a Echeverría por genocidio y no podían hacer públicas sus investigaciones, pero informalmente me comentaron que los desaparecidos de la masacre de Tlatelolco también pudieron haber sido enterrados ahí.

El Comité ’68 había ubicado varios sitios usados para desaparecer gente, lamentablemente Raúl Álvarez Garín falleció y no supe qué pasó después con toda esa información que él recopiló durante años. La FEMOSPP y la PGR no le dieron seguimiento a éstas pesquisas.

La única institución que me hizo caso fue la Comisión Nacional de Búsqueda, que pese a sus problemas presupuestales, ha operado con profesionalismo.  Mi experiencia directa e indirecta con otras instituciones que trabajan el tema. SEGOB, FGR, CEAV, etc. No ha sido la mejor.

Yo le dije a la CNB que si los desaparecidos de Tlatelolco y de Nepantla habían sido enterrados en esa sección del panteón Dolores, seguramente otros guerrilleros también fueron inhumados ahí.

La CNB investigó por su cuenta y así es como encontró que también miembros de la Liga Comunista 23 de Septiembre habían sido enviados ahí. En los registros del panteón han encontrado, además, los nombres de cientos de personas reportadas como desaparecidas.

Celebro estos logros por las familias de los desaparecidos, por la memoria histórica, por la lucha por la verdad y la justicia y porque lo logrado ha sido no gracias a ningún gobierno sino a pesar de todos los gobiernos.

Reconozco a los historiadores de la CNB involucradas en estas labores, sé que han trabajado con profesionalismo y sin buscar los reflectores. Los resultados están a la vista.

Aclaro que un nunca supe la identidad de las mujeres que presuntamente visitaban la tumba de Dení. En su familia todos son consistentes en negar que supieran donde fue enterrada. Luis Prieto cometió el error de cremar sus restos, nunca sabremos si eran los de Dení o no.

La última nota surrealista del tema es que Dení Prieto es prima de Rodrigo Prieto, el famoso cinematógrafo de varias películas hollywoodenses, incluida Barbie. Rodrigo ha comentado su interés en hacer una serie basada en la historia de Dení.”

(Fin del X (antes twiter).

Imágen del yate Granma

Nuevos barcos han partido ya a los mares turbulentos de los mundos que se transforman en cada país, cada tierra, cada pueblo y ciudad, en cada paso que la memoria resurge en futuros que se trabajan, luchan y defienden ante los nuevos imperialismos y colonialismos que la humanidad padece.

Y como memoria digna que aspira al futuro podemos decir que es en el ejemplo digno de nuestros compañeros y nuestras compañeras, como Dení, que no son moneda de cambio ni apuesta, sino como ejemplo, congruencia y valentía. Por ello recordar es mirar a futuro y coherencia hoy, por eso mes a mes y año con año miramos atrás y adelante, a los lados miramos, y vemos el horizonte que marcan nuestras y otras tierras, otros pueblos y los nuestros que luchan por la liberación y el derecho de vivir en paz.

Grupo editorial de la casa de todas y todos.

Diciembre, 2023.

Año 30 del levantamiento armado y de la Declaración de Guerra de la Selva Lacandona.




… de nuevo… ¡estámos aquí …!

*La imagen que se presenta en portada es la viñeta utilizada como inicio de Sección en el NUPI, donde se publicaban los artículos enviados por los compañeros insurgentes.

Editorial noviembre, 2023.

Ya con la entrada de los fríos como cada noviembre, en nuestra labor de Rescate de la Memoria Histórica, recordamos a jóvenes rebeldes antimperialistas, como lo fue Xavier Mina, guerrillero internacionalista nacido en Otano, y fusilado a sus 28 años por el Ejercito Realista un 11 de noviembre de 1817… y a los compañeros Gabriel y Alfonso, el primero nacido un 21 de noviembre y asesinado por el Ejército Federal un 14 de febrero de 1974 en San Miguel Nepantla, Edo. de México y el Cro. Alfonso, también nacido el 8 de noviembre, desaparecido político que forma parte de la Lista de Ocosingo.

Compañeros Gabriel y Alfonso…. ¡Presentes!

En ésta página, hemos narrado en diferentes momentos hechos reales, desde hace 9 años, documentados y relatados con la ayuda del Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos. También cabe señalar que entre nuestros pueblos el 1 y 2 de noviembre es el fin e inicio de ciclos, donde la memoria de nuestras compañeras y compañeros renace en las mazorcas y semillas de las tierras que luchando se vuelven libres y dignas con el trabajo organizado por la liberación de nuestros pueblos. Noviembre también va cerrando el tiempo con la creación y fundación de planes y contingentes, de ejércitos de liberación y de toma de pueblos y ciudades en todos los territorios del Sur, Centro, Norte, Occidente y Oriente.

Así, el 17 de noviembre de 2014 escribíamos en ésta página:

“En la historia de los pueblos existen pasajes que, aunque poco conocidos, no dejan de ser ciertos. Nuestra Patria, México, que con sus poco más de 200 años conquistó el derecho a nombrarse libre y soberana, cuenta con muchos de esos episodios históricos. Nos incumbe conocer más que a nadie, nuestra historia y hacer fuerte la memoria; de lo contrario, corremos el riesgo de enfrentarnos en forma recurrente a problemas colectivos que no entendemos, lo cual nos incapacita para construir soluciones en beneficio de nuestro pueblo.

Porque hemos sido partícipes y testigos de la historia, es nuestro deber con la Patria darla a conocer en ésta fecha histórica.”

El compañero Jeremías, en el Tomo IV de la Serie Dignificar la Historia, Toma de Pueblos (1983-1993), en la página 49 nos habla sobre…

“La formación de un Ejército: los primeros contactos.”

Los tres pueblos que hicieron posible el crecimiento de la Organización fueron T****, H**** y M**** antes de 1983.

Mis padres, llamado C**** y mis dos hermanos carnales R**** y M**** de M****. Fundadores. Con ellos tuve la oportunidad de platicar en los movimientos armados y la guerra de Nicaragua, Salvador, Guatemala, que luchan en contra del imperialismo.

Yo les comenté que también nosotros debemos de organizarnos y prepararnos, mis familiares les pareció muy importante comenzando dando clases política y trabajos clandestinos. Contacto directo con el compañero Jorge, él fue el primero en visitar la familia, estuvo varios días, comimos un puerco.

Estando claros porque es necesario una lucha revolucionaria. El compañero Jorge comienza a darnos trabajo con cada cual. A mi papá le dan el trabajo de dar pláticas a los compañeros mayores de 50 a 60 años a los conscientes y a los más consientes, hacer el trabajo de reclutamiento. Y mis dos carnales R**** y M****, reciben la tarea de dar pláticas, situaciones del país, los patrones, los terratenientes, esclavismo, monopolio y hacer trabajo de reclutamiento.

A mí me toca yo Jeremías, e ir en los pueblos y hablar a sus papás los que tengan niños mayores de 10 años para prepararse y estudien y algún día vuelvan a su respectiva comunidad. Se lanzan a los compañeritos Maribel y Jesús de M****. Joel y Manuel de H****. Angélica de T****. A veces se ponen a llorar, también los acompaño cuando me toca hacer el trabajo de enlace y siempre los encuentro en las casas de seguridad, más avanzados y listos. Después de 1983 en M**** ya habían muchos compañeros y compañeras de diferentes edades y una comunidad muy grande en su explosión demográfica. Mi familia toma la responsabilidad de hacer todas las tareas de la organización y los problemas que resolver. A mí siempre me dan la tarea de organizarlos y darles clases políticas formando cuadros o células, y buscar apoyos y materiales despertares entre otros apoyos.

El primer apoyo que recibimos económicamente de parte de compañero Comandante Insurgente en Jefe Germán para la comunidad de M****, quien recibió en sus manos de R**** y M****, con el fin de construir un trapiche para moler caña y fabricar panela o piloncillo o ya sea miel, luego vender o llevar para los compañeros que están en la montaña.”

(…)

Aprendizaje político

Luego en otra cita, me llevaron a su pueblo. Ahí estaba el compañero Frank nos conocimos el me vio muy jovencito, me dio pláticas políticas. Yo no tenía nada de dudas. Me dieron el primer trabajo grande y muy difícil y riesgo es la exploración al Río Negro, me lancé por ahí con cuatro compañeros del mismo pueblo, que son J****, I****, D**** y D****.  Conocer a más compañeros de los pueblos, a los más honestos en todo su carácter de hablar y participación con sus cumplimientos. Conoce todos los caminos, entradas y salidas. Hacer contactos de trabajo de comunidad con otra. Hacer pruebas de alimentos que puedan durar más en las montañas. Construir canoas, cayucos en los ríos y Laguna Miramar, preparando para recibir a los compañeros que vienen de la ciudad trayendo el pensamiento de lucha tanto en el campo como en la ciudad.

El contacto: 17 de noviembre de 1983

Caminamos tres días para ir a recoger a los compañeros en las lomas de Rómulo Calzada, que también le llaman San Juan, ahí termina el camino de terracería.

A los compañeros nos recibieron con abrazos revolucionarios y saludos, Comandante en Jefe Germán, Comandante Elisa, y compañero Rodo. Tres ladinos y tres indígenas, Frank, Jorge y Javier, y nosotros también como indígenas de las comunidades, T**** y H****. Está Jeremías, Juan, Fidencio, Samuel, Isaías, David, Daniel. La marcha continúa al día siguiente, con destino a Chuncerro, pasamos por Sultana con rumbo a Ibarra, Guanal y Plan de Guadalupe. Los compañeros ladinos van calidad de Pemex, uniformados, mis compañeros se regresan con el cargamento de armas y municiones a T***, yo me quedé con los compas en mi regreso me toca el turno de regresar a casa.

Me perdí un día en la montaña y ahí me quedé. Se hizo de noche, sin algo de comer.

En las comunidades nos apoyaban con un poco de alimento por el idioma que tenía Tzeltal y los otros Chol, Tzotzil. Con dos pueblos H**** y T****. Así llegamos en la última comunidad lugar y entrada en la Selva Lacandona (P****). Me toca regresar a casa y también a mis compañeros, …y desde las lomas más altas del lugar, nos ordenan regresar.

“Me dio la facilidad en el trabajo, de conocer a los folletos o Despertar del Pueblo, Despertar Mexicano. Boletín. El Chiltak y temas de liberación. Había una necesidad con todas las comunidades de conocer y saber el por qué los bombardeos de Guatemala, todos preguntaban y nosotros que debemos hacer con ese enemigo de todos y también nosotros de vemos luchar y prepararnos, nos obligó a movernos más con una experiencia y conocimientos de las mismas comunidades que ellas tenían y de cómo hacer éste enlace campesino del uno al otro.”

1983: Primer Contingente Combatientes EZLN

Y ahí, en las lomas más altas del lugar –como relata Jeremías- se realizó la formación militar de los compañeros insurgentes y el compañero Primer responsable de las Fuerzas de Liberación Nacional y Comandante Insurgente Germán quien señaló:

“Hoy, 17 de noviembre de 1983, iniciamos una nueva etapa de lucha, donde podrán llegar los compañeros de los pueblos hasta hacer crecer éste Ejército… llamado Ejército Zapatista de Liberación Nacional EZLN.”

En la página 26 del mismo libro, el compañero Frank en su entrevista narra sobre el mismo suceso:

“Pero ¿tu esperaste en el lugar —digamos— en esto de los preparativos en la montaña, o entraste en el camión donde entraron todos, el grupo?

Pues es que mira, más bien tenía yo que servir de guía, de guía porque como el trabajo político lo estaba yo realizando y la relación, el contacto, lo tenía directamente con los compas, entonces por eso casi que mi trabajo fue, cómo guiar a los compas, ir hasta la montaña. Bueno, ya en la montaña, pues ya lo dirigía el Comandante Germán: ”Vamos a subir aquí en este camino”.

Platícame sobre la hora de la llegada de los compañeros… pues más o menos ¿a qué hora llegaron?, ¿bajaron cosas?

Fue en la noche sí, ya entrada la noche nosotros nos trasladamos para llegar al Rio Jataté, en ¿cómo se llama?. Ahí hicimos un campamentito y ahí al día siguiente, es tiempo de lluvia. Sí, noviembre… Ya crecido el río, ¡hasta la chingada. Sí, había que atravesar hasta nadando el río porque los cayucos los arrasaban y porque además como teníamos un contacto ahí directo, había que gritar. Había quien nos podía cruzar, pero como éramos extraños, pues ese era el problema.

Mujeres, ¿iba nada más la compañera Elisa?

 Sí. Ya nos vamos, nos fuimos adentrando. Primero, llegamos a la orilla del Río Jataté, después del río Jataté nos fuimos de la Sultana “arribita”, entre la Sultana y Plan de Guadalupe se llama el pueblito, ahí pernoctamos. Fíjate que no caminamos mucho. No sé por qué. Estábamos muy pesados. Llevábamos mucha carga, bien cansados, ahí quedamos. Ahí nos escondía más o menos el compa ese, el “primo”, y ya estuvimos ahí. Salimos de noche, salimos de madrugada… creo… Sí, porque las comunidades no sabían, sí así es.”

Finalmente la Cra. Comandante Elisa hace un breve análisis de lo que ha sido el constante “subir, siempre subir…  a las lomas más altas del lugar…. y en el primer N.U.P.I. que apareció en 1984, narra lo vivido y lo acontecido a finales de 1983.

“…por todo ello: DE NUEVO ESTAMOS AQUÍ”

Por la Cra. Elisa.

INTRODUCCION.

La noche del 13 de febrero de 1974, nuestro primer responsable -que se encontraba al mando del núcleo guerrillero Emiliano Zapata en la sierra- escuchó por radio la noticia de que la policía había detenido a una pareja de guerrilleros en una casa de seguridad de Monterrey. Temiendo que se tratara de una casa de la organización, el compañero Manuel destacó al Cro. Alfredo para que investigara lo ocurrido, tomase las medidas necesarias para proteger a la organización y, después, se reintegrara al núcleo guerrillero.

 Y desde que salió de la selva llevaba Alfredo ésa que, más que orden era una consigna, una directriz básica para toda la organización: “Volver a las montañas”. Al principio, para reanudar el contacto con los compañeros del núcleo. Después, cuando estos intentos resultaron infructuosos, nuestro inolvidable Alfredo retornó a la selva al mando de un nuevo contingente guerrillero, sin abandonar la esperanza de averiguar lo ocurrido a los otros compañeros, pero ahora con el propósito de proseguir la lucha revolucionaria estableciendo en la selva un nuevo grupo de combatientes. Allá lo sorprendió su muerte, a raíz de la cual se produjo la escisión que nos hizo abandonar otra vez la zona.

Y otra vez, ahora bajo el mando de nuestro compañero Raúl, los militantes más antiguos, y en menor medida los de reciente incorporación, manteníamos esa esperanza, seguíamos fieles a ese principio estratégico. Y aunque el tronco clandestino le brotaban nuevas y vigorosas ramas de organizaciones políticas obreras, campesinas, estudiantiles, el desarrollo de la lucha de clases confirmaba la necesidad de una vanguardia político-militar, con un grupo armado políticamente arraigado en la zona inicial de operaciones. Al avanzar en nuestros estudios teóricos, al profundizar nuestros vínculos con obreros y campesinos, al prepararnos físicamente, al pensar en nuestros compañeros guerrilleros, brillaba en nuestra mente, como una estrella lejana pero inextinguible, la consigna, el sueño, el compromiso: volver a las montañas.

Y volvíamos. Al mando de Raúl nos internábamos en aquellos montes, reconociendo nuestras picadas, saludando en silencio a alguna vieja ceiba, besando agradecidos la plata de algún arroyo que era y no era el mismo que nos había saciado hacía un año, o dos, o tres… Eran exploraciones de práctica: los novatos aprendieron a usar la brújula, a cazar, a hacer fuego, a preparar emboscadas, a amar intensamente esas montañas, ese aire purísimo que al emprender el regreso a la ciudad parecía susurrar entre el follaje: “vuelvan, compañeros; aquí estaremos esperando…”

Y ahora, culminando una dura etapa de trabajo político y organizativo, avanzando trabajosa pero firmemente por el camino donde cayeron Ruth y Mario, hace poco hemos vuelto, esta vez para quedarnos. Con nuevos compañeros, con guerrilleros campesinos, con apoyo político de los pobladores, con una sólida infraestructura logística, con una modesta pero eficaz organización nacional.

Compañeros Manuel, Alfredo, hermanos del núcleo “Emiliano Zapata”: ¡De nuevo estamos aquí!

Hace algunos años sobre alguna de las brechas que entran en la selva chiapaneca, hicimos contacto con dos compañeros quienes rápidamente nos ayudaron a internarnos entre la maleza. Era de noche y lloviznaba, nos incorporábamos a partir de ese momento, al grupo que realizaba trabajo de exploración en la zona.

Muy poco después se disipó la emoción de las botas y el aire romántico que nos hizo insensibles a los anunciados primeros piquetes de mosquitos… y después de la primera caminata, hasta la belleza del paisaje. En el primer descanso en que nos dedicamos a parchar ampollas me daba vueltas en la cabeza la idea de la lucha como una ineludible, penosa, fatigante necesidad y no como una opción alegremente elegida.

Unos 5 días después llegamos al campamento donde estaban el resto –bastante reducido por cierto—de los compañeros. Esa tarde del 5 de Agosto de 1976 recordamos el nacimiento del compañero Salvador con una emoción muy especial.

Durante los días que siguieron los compañeros nos enseñaron a cazar, a orientarnos con brújula, a hacer pequeños levantamientos topográficos, a instalar nuestros techos y hamacas. Decían, y no como un cumplido, que habíamos aprendido muy pronto comparado con lo que ellos tardaron en aprender. En general nos adaptamos rápido físicamente, aún cuando no escasearon las ampollas y los desarreglos intestinales, poco a poco nos fuimos integrando al grupo, asumiendo cada vez con mayor amplitud sus tareas, si bien siempre nos tuvieron ciertas consideraciones, a la hora de mover carga, a las mujeres –unos 5 kg. menos que a los demás-.

Los compañeros habían llegado 11 meses antes que nosotros y habían batallado mucho más para adaptarse, no que fuesen menos hábiles, al contrario, sino porque no habían tenido maestro, ni experiencia previa. Estaban probando, desde los equipos hasta la propia resistencia física, tanto como la consistencia moral e ideológica de algunos compañeros. Conocían muy poco el terreno y sólo conocían en el mapa.

Durante los primeros días de su llegada, literalmente tropezaban con los pueblos indígenas de la zona; provocando, no pocas veces con su sola presencia el terror y la desbandada de algunos campesinos. Seguramente tenían una apariencia patibularia para quienes no los conocieran, a mí me parecían feos. Lo malo fue que no faltaron las denuncias a las autoridades; solo que éstas se hicieron… sordas, como siempre que los campesinos se dirigen a ellas.

Cuando nosotros llegamos todavía evitábamos el contacto con los habitantes de la zona. A veces, éste se producía por casualidad, pero siempre tratábamos de eludirlo. Eso sí, soñábamos con el día en que haríamos alguna labor con los campesinos, pero ese día se veía lejano, dependiente de factores que a veces se antojaban míticos: el inicio de la lucha, o el reencuentro con Manuel.

Teníamos todos una fe ciega en las masas. Ciega de verdad, así la vemos ahora, en el mejor de los casos “casi religiosa” … porque por entonces, de las masas, ni sus luces. Y la verdad es que en la selva la “fe” de los menos politizados se desmoronaba en ocasiones. Hubo una que otra deserción, pedidos de cambio a la ciudad, bajas.

Pero la determinación de los que quedábamos se reafirmaba cuando en los encuentros casuales con los campesinos que arrastraban 20 kilómetros su hambre para ir a recoger un racimo de plátanos a un pueblo abandonado, constatábamos la indignada sorpresa con que acogían la noticia de una nueva devaluación. -“Tal vez las cosas se compongan en el próximo sexenio”-, les dijimos provocadoramente, -“Pues ya pueden acabarse de descomponer de una vez”-, nos contestaron. Y se reafirmaba también, cuando airadamente constatábamos la presencia en la zona de Norteamericanos en “entrenamiento de sobrevivencia”, para recordar, por si se nos olvidaba, al enemigo preparando constantemente mercenarios para agredir a los pueblos.

Once meses después, circunstancias ajenas a esta determinación nos hicieron suspender temporalmente los trabajos exploratorios.

Emprendimos otros, en otras regiones, y luego regresamos a la selva muchas veces, pero ya no a explorar, ni a quedarnos, sino en cortas jornadas de entrenamiento militar. Estas eran a veces bastante cortas, e informales –especialmente cuando se invitaba a militantes urbanos, o colaboradores no acostumbrados a caminar, ni a la disciplina-, pero a veces eran más prolongadas e intensas. Y coincidieron con las maniobras del ejército burgués.

De cualquier manera estas jornadas servían para darse idea del lugar donde los compañeros mejor podían ubicarse. Le servían a ellos y a la D.N. 

Quién sabe si los campesinos de la zona hayan insistido en denunciarnos, pero ya no se asustaban al vernos, nos saludaban muy sonrientes cuando pasábamos, enseñando los dientes que les faltaban. Nos deteníamos, en el tan esperado contacto con los campesinos. Se realizó en la ciudad primero, antes de que fuéramos a su pueblo; pero esto ocurrió en otra zona del vasto territorio nacional.

Y esa historia es ya conocida: empezaron por pedir entrenamiento militar, les demostramos que el asunto requería dedicación y tiempo, y empezaron a militar en sus pueblos, luego algunos de ellos fueron a vivir a nuestras casas, primero como semiprofesionales y como profesionales después. Algunos vinieron, como los demás militantes no campesinos, a los entrenamientos. Elegimos, descartamos, propusimos y de nuevo estamos aquí junto a ellos.

Solo que ahora, pensamos, será más tiempo. Porque los compañeros de origen campesino que nos acompañan no son la única diferencia respecto a épocas anteriores.  Sin mencionar la agudización de la crisis económica y esas pamplinas, y que esperamos, ha quedado una más sólida estructura con los compañeros de las ciudades; ahora los campesinos no los militantes, sino los que son todavía campesinos, pero ya saben de nosotros y colaboran o simpatizan con nuestra lucha, están más cercanos a nosotros, ideológicamente, sobre todo.

Es cierto que llegaron tarde, pero esto no es ninguna metáfora, sino la verdad, se retrasaron unas dos horas el día que llegamos. Llegaron corriendo, con pantalones cortos, todos remendados, para aligerarse. El zapato de uno de ellos se había roto y eso le produjo ampollas al compañero –minúsculas, con las de nosotros que solemos caminar-, por eso se retrasaron.

Esta es época de lluvias aquí pero ese día, como lo pronosticaron ellos no llovió, así es que después de comer un poco de atún que llevábamos, con sus tortillas nos acomodamos por ahí, sin poner los techos y dormimos. Al otro día tampoco llovió, ni los siguientes, lo cual facilitó la marcha, empezamos a caminar, guiados por ellos, luego de distribuir la carga. Distribuir la carga significó cargar con nuestros equipos personales y pasarles a ellos las cosas pesadas –casi todo—para tratar de ir a su paso. Sin conseguirlo, por supuesto.

Así resulto que comparada con las anteriores esta entrada fue casi un paseo –recuerdo otra ocasión en que vinimos, una ampolla de Isma le gastó la mitad del talón y tardó un mes en cerrarle. Ahora me di el lujo de enfermarme, un compañero campesino también-, de cosas que jamás nos aquejaron aquí, gripa, y una que casi termina en neumonía, sin que afectara mayormente la actividad del grupo. No todas las novedades tenían que ser buenas; pero en la cacería nos fue bien. Las tortillas a la hora de comer nos pusieron de lo más optimistas. Antes no era raro que camináramos 20 kilómetros diarios varios días seguidos, que pasáramos el tiempo explorando –todos usábamos brújulas de buena calidad-, que leyéramos dos libros en un año, o que el grupo se viera limitado a cuatro y hasta tres compañeros –claro, uno de ellos era Alfredo—sin que aflojara sensiblemente el ritmo, ni la productividad del trabajo.

Ahora necesitamos limitar las jornadas de trabajo ambulatorio porque es más importante estudiar más, atender desde la educación formal de los compas –matemáticas, geografía, todo eso-, hasta sus estudios políticos. Eso quiere decir también cargar con materiales: libros, cuadernos, plásticos más grandes, lámparas, etc. que antes no necesitábamos.

Como los trabajos se diversifican, y a ello contribuye también el endurecimiento del cerco militar sobre la zona, que ya no es solo teórico, aunque si meramente profiláctico dada la vecindad centroamericana, necesitamos ser más para realizarlos.  Confiamos en los campesinos que llegan, que llegan, y llegarán para realizar muchos de ellos. Pero lo que se percibe cada vez más, con mayor claridad, es la necesidad de la presencia de los obreros aquí. Bueno… de algunos. De la dirección proletaria, pues. Pueden no tener callos en las manos si su ideología es la de la clase obrera. Esto es para tomarlo en serio, esta lucha necesita también aquí, y esta no es ninguna novedad, ser dirigida por OBREROS Y CAMPESINOS y ahorita necesitamos formar esa dirección… por todo ello: de nuevo estámos aquí. “

(…)

2023, año 40 de la fundación del EZLN por las FLN

¡Vivir por la patria o morir por la libertad!

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.




Editorial Octubre, 2023: Mes de luna grande que ilumina avances a paso firme.

Varios son los acontecimientos de octubre y es nuestra obligación recordar a inolvidables compañeras y compañeros que perdieron la vida en cumplimiento del su deber, en octubre recordamos a nuestra compañera Aurora, o Paz, nacida un primero de octubre. El veintitrés de octubre, cumpleaños 81 de nuestro primer responsable histórico compañero Manuel, y recordamos con tristeza a nuestro compañero Sub Comandante Insurgente Pedro, asesinado por el ejército federal el primero de enero de 1994 en la toma del municipio de las Margaritas, Chiapas, y que nació en un 26 de octubre.

Entre las efemérides hay una muy importante, el 12 de octubre, cuando carabelas guiadas por la ignorancia y la ambición, arribaron para abrir nuevas rutas de mercancías y decidieron invadir un continente para ellos desconocido, y que trajeron a conquistadores en busca de riquezas, quienes llegaron a arrebatarlas sin importar el costo humano, dos de los genocidios más grandes de la historia el de los pueblos indígenas y el de la trata esclavista sobre los pueblos africanos, ambos existen dignificándose hoy en día. En ésta fecha debemos exaltar la lucha de los pueblos originarios que desde ese momento iniciaron su resistencia antiimperialista, anticolonialista y antiracista, se organizaron y lucharon hasta encontrar su libertad y hasta hoy día, con otros métodos “modernos”, nuevos conquistadores pretenden torpemente arrebatarles todavía lo que les pertenece. Hoy se lucha en los territorios y mareas de millones de migrantes padecen las condiciones que obliga el capitalismo imperialista. 12 de octubre, Día de la resistencia indígena, negra y popular.

No se puede pasar por alto, en octubre, el Aniversario de nuestro Comandante Ernesto Ché Guevara, que a 56 años de su captura y asesinato en manos del Ejército Boliviano de la mano del gobierno de Estados Unidos, su legado sigue tan vivo como entonces, su ejemplo de revolucionario se ha multiplicado por muchas partes de América Latina y del mundo, pues el imperialismo sigue vivo.

También en octubre, el día 25 (Calendario juliano), que era el calendario vigente en la entonces Rusia zarista, el Partido Bolchevique, dirigido no sólo por Vladimir Ilich Lenin, sino que al lado de los trabajadores, mujeres y soldados de Petrogrado, derrocaron al gobierno provisional ruso e instauraron el primer Estado socialista del mundo. La conocida Revolución de Octubre logró acabar con tres siglos de dinastía Romanov en Rusia, la instauración del primer país socialista en el mundo y la creación de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas en 1922.

Otro acontecimiento que nos dejó enseñanzas firmes de la necesidad de la organización de los trabajadores es la que se dio en la Plaza de las Tres Culturas en Tlaltelolco el 2 de octubre de 1968, donde el Estado asesinó a estudiantes conscientes que ondeaban las banderas de la democracia, las libertades y la justicia, en un pliego petitorio que incluía la libertad de los presos políticos, la desaparición de los cuerpos represivos y la mejora de condiciones de vida para todas y todos.  Entre julio y octubre de 1968 muchos fueron asesinados por el Ejército Federal, para ellas y ellos nuestro total respeto, otros tantos fueron a la cárcel, muchos salieron y crearon diferentes organizaciones ante la cerrazón del Estado, con derroteros diferentes; algunas continuaron, otras cayeron en el reformismo y otras de plano formaron parte de la “izquierda electorera”.

Esta ocasión presentamos una selección de párrafos del artículo de Nepantla No. 25, del año 1988, escrito por el Compañero Comandante Insurgente Rodrigo: Comisión de Educación: La formación de nuestros cuadros, que indudablemente habla sobre la formación de “cuadros”, pero también de la escuelita, del aula que fue inaugurada el 23 de octubre de ese año y que llevó el nombre de “Lic. César Yáñez” (Cro. Pedro, Cro Manuel). El texto completo lo pueden leer en el Cuaderno de trabajo IV de la serie Dignificar la Historia, Toma de Pueblos, (1983-1993) en la pag.189.

Aquí la selección de párrafos finales del citado artículo:

“Unas primeras conclusiones:

*La historia de la formación de nuestros cuadros es en verdad la historia misma de la organización, porque es real que nuestros dirigentes siempre han puesto especial atención a la formación de los militantes.

*Desde que se fundó nuestra organización se ha tratado de dar a los compañeros una formación integral: teórica, militar, organizativa, cultural y técnica conforme lo han permitido nuestros recursos, capacidad y experiencia.  Quienes se quejan de que no se les ha capacitado son personas apáticas y sin sentido autocrítico que delegan totalmente en el superior la responsabilidad (y por ende las fallas) de su formación.  Suelen ser exigentes críticos de su responsable, al que convierten en un pretexto de sus propias limitaciones.  No saben exigir sus derechos de militante.

*El concepto mismo de lo que es un cuadro de las Fuerzas se ha ido enriqueciendo con el tiempo: junto a los cuadros políticos en un sentido clásico, contamos ahora con cuadros militares (los jefes de nuestro E. Z.) y aun con cuadros técnicos, como los oficiales armeros, los de sanidad y otros servicios, así como los compañeros impresores, por ejemplo.  Hemos alcanzado un primer nivel de especialización técnica sobre una común base política.

*Reconociendo que en buena medida constituyen aplicaciones del socialismo científico a nuestra realidad, han sido nuestras modestas elaboraciones teóricas, desde los primeros comunicados, las que han formado políticamente a nuestros militantes.  Pero ha sido básicamente nuestra práctica (y con ella nuestros errores), la que más ha contribuido a la formación de nuestros cuadros.

*Una primera implicación de esto es que nuestros cuadros se forman en (por) nuestra organización.  Porque, hasta ahora, sólo nuestra organización tiene la política y la práctica que la diferencian de otros grupos y partidos.

Una segunda implicación es que, en un sentido amplio, es toda la organización en su conjunto la que forma a sus cuadros.

Por último, insistiré en que no hay militante de tiempo completo al que se haya negado la capacitación o la posibilidad de hacer trabajo de responsable, de cuadro organizativo.  Y a pesar de ello nunca hemos tenido  –y temo que nunca tengamos- suficientes compañeros dispuestos y capaces para realizar tanto el trabajo político como los demás trabajos indispensables para la formación integral de un revolucionario profesional (no de un aficionado).  Digo esto porque algunos compañeros –marcadamente intelectuales, estudiantes, empleaos y religiosos- alimentan la idea errónea de que “hay militantes que podrían” (en realidad están pensando en ellos), “especializarse” en el trabajo “político”, o sea en dirigir políticamente a otros militantes, de preferencia (curiosamente) a obreros.

Voy a pasar por alto el papel del trabajo manual en la transformación del “pequebú” en revolucionario; pero lo que no puedo pasar por alto (como hacen estos compañeros), es la importancia de los conocimientos de estrategia, táctica y técnica militar.  ¿Cómo se puede explicar al pueblo la necesidad y posibilidad de la lucha armada concreta sin conocimientos concretos sobre esa lucha? Tampoco puedo pasar por alto la técnica del clandestinaje.  ¿Cómo se puede hablar a pueblo de las posibilidades reales de la represión sin indicarle medidas concretas para evitarla? ¿Y dónde se van a adquirir esos conocimientos? “Para eso están los cursos, para eso sirve la escuela de cuadros”, me dirán.  Pero yo pregunto: ¿Y la disciplina y el compañerismo, Y LAS MIL TAREAS CONCRETAS QUE SON NECESARIAS PARA EL AVANCE, O SEA PARA EL TRIUNFO DE LA REVOLUCIÓN? ¿Dónde se van a aprender? ¿Y acaso no es cierto que el principal problema, la principal falla de los responsables inexpertos –señaladamente los que no son profesionales- consiste precisamente en su incapacidad para saber qué tareas concretas proponer a sus subordinados? ¡Esa formación político-militar (disciplina, seguridad), esa capacidad para concretar las necesidades políticas en trabajos prácticos, esa seriedad (cumplir lo planeado) es lo que distingue a nuestros cuadros de otras organizaciones! Ellas sólo pueden proponer lecturas y escrituras porque es lo que practican y lo que reproducen con sus prontamente hastiados militantes.  Y eso es lo que nosotros no hacemos; PERO

Ultima conclusión (y primera llamada).

Pero entonces surgen dos problemas importantísimos.  Primero: ¿acaso estoy sosteniendo que las únicas escuelas en que se forman los cuadros revolucionarios son nuestras clásicas casas de seguridad? Y segundo: ¿cómo resolver el famoso problema de la vinculación con las masas desde el punto de vista de la formación de cuadros? Vayamos por partes.

Lo que yo sostengo, es que los militantes que están dispuestos a dedicar todo su tiempo a la lucha revolucionaria son los únicos que pueden adquirir los conocimientos teóricos prácticos necesarios para realizar eficazmente el trabajo organizativo.  Lo que ocurre es que HASTA AHORA, la mejor manera, tanto de aprovechar esa disposición como de formar a esos compañeros, ha sido llevándolos a na casa de seguridad (y de unos años para acá a un campamento). (Dejo de lado la idea absurda según la cual la casa de seguridad es una especie de prisión donde el revolucionario aprende cómo sectarizase de las masas).

Y lo cierto es que HASTA AHORA han sido esos cuadros formados en la clandestinidad los que mejor han realizado el trabajo semilegal: las conferencias públicas, las colectas de medicinas, las reuniones de obreros (ya no hablemos de las maniobras militares masivas dirigidas por el E.Z. en el Frente Zapatista).

¿Y por qué “HASTA AHORA” así, con mayúsculas? ¡Ah, pues porque DE AQUÍ EN ADELANTE, donde las circunstancias (o sea el trabajo previo) lo permitan Y SIN DESCUIDAR LAS TAREAS CLANDESTINAS, se va a presentar la posibilidad real y la necesidad objetiva de que nuestro trabajo político pase de los colectivos pequeños (2 o 3 docenas de participantes) a grupos más numerosos: todavía no un sindicato completo, todavía no toda una barriada popular, todavía no una escuela íntegra; pero sí una sección sindical, una parte del barrio, un grupo de estudiantes, otro de maestros!.  Y es evidente que DESE AHORA teneos que empezar a capacitar a nuestros cuadros para que hagan este nuevo trabajo con nuestros métodos y nuestros lineamientos.  ¡Esa es una de las necesidades que debe cubrir la escuela de cuadros!.

Los candidatos lógicos para realizar este trabajo (que por cierto no se desarrolla únicamente en el medio proletario sino también entre colonos, estudiantes, maestros), son militantes de preferencia jóvenes, de preferencia capacitados técnicamente, dispuestos a ingresar como obreros en las industrias en que podamos colocarlos.  Y, desde luego, los compañeros obreros que estén dispuestos, no a separarse de su familia para vivir en una casa de seguridad largos años; pero sí a capacitarse como dirigentes obreros revolucionarios y a poner en práctica esos conocimientos.

No creo equivocarme al afirmar que cuando ese trabajo alcance cierto nivel cuantitativo, se producirá un cambio cualitativo en nuestra querida organización.

Pero eso es futurismo.  Por ahora, quiero terminar diciendo que este artículo está dirigido especialmente a ti, compañero obrero, a ti, militante que aspiras a ser un verdadero cuadro revolucionario. ¡La organización espera, NECESITA, tu respuesta!”

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.