Crónica de la lucha magisterial en Ixtepec y el ataque policiaco del Estado
*Corresponsalía de la compañera Eva.
“Los padres de familia de Oaxaca les damos el apoyo total a los maestros de todo el país”.
“No a la reforma educativa”.
“No a la privatización de la educación”.
“Su lucha es nuestra lucha; no estamos todos faltan 43 y miles más”
Estas consignas destacaron en la marcha del pasado 25 de mayo en Ciudad Ixtepec, cuyo acontecimiento fue un parteaguas de la lucha actual en esta localidad. En esta movilización social, no sólo se expresó la solidaridad popular a la lucha magisterial, sino que además fue una manifestación que reflejó el descontento del pueblo de Ixtepec y otros pueblos de la región del Istmo de Tehuantepec por la mal llamada reforma educativa.
Esta marcha partió del monumento a Juárez, en la calzada Gral. Joaquín Amaro, de la colonia Moderna, y concluyó con un mitin en el parque Garibaldi de la colonia La estación. Durante el recorrido se observaron actos de solidaridad de diferentes sectores de la población, a la que acudió un aproximado de 3500 personas, entre ellas marcharon niños y ancianos. El contingente se detuvo por unos minutos frente al cuartel de la 46° zona militar, en el que se realizó un acto de repudió hacia esta institución militar. Los uniformados se encontraban resguardando el edificio, y realizaban grabaciones y fotografías de esta movilización.
Desde el inicio de esta jornada de lucha magisterial, padres de familia y estudiantes de la región han demostrado respaldo a los maestros, y las muestras de apoyo se revelaron en diversas localidades de la región y del estado. Cabe decir que todas estas acciones han sido de carácter pacífico, ya que en ellas ha destacado la participación de padres de familia con sus hijos.
Aunado a los sucesos mencionados, el día 17 de junio, quedó demostrada que la actitud del gobierno mexicano es específicamente violenta. En este día los policías estatales y federales agredieron una manifestación pacífica de maestros, quienes se encontraban en la caseta de cobro de la súper carretera liberando el peaje vehicular.
Ante esta embestida, las llamadas de apoyo fueron emitidas a través de aparatos de sonido en diferentes barrios de Ixtepec, así como por estaciones de radio. La convocatoria era clara: acudir a la lucha para evitar la inserción de la policía federal y estatal, que pretendía embestir -por esta vía de comunicación- las instalaciones de la refinería localizada en el puerto de Salina Cruz, con el objetivo de abrir dichas instalaciones ya que se encontraban tomadas -desde hace varios días- por los maestros en colaboración de trabajadores petroleros.
La policía irrumpió al territorio de Ixtepec desde dos vías; la policía estatal llegó por la carretera Juchitán- Ixtepec, quienes previamente cargaron gasolina en la colonia Moderna de Ixtepec. Por su parte, la policía federal llegó por la súper carreta, probablemente provenientes de Zanatepec.
La población comenzó a acudir en dirección a la súper carretera. Algunas personas de las colonias Raymundo Meléndez y Brena Torres de Ixtepec, bloquearon el acceso vehicular en las inmediaciones de la escuela secundaria técnica 27. Y más adelante, sobre el boulevard Ixtepec – Chihuitán (en dirección a la súper carretera), un camión de volteo llegó a este sitio para bloquear el acceso con montones de grava. Algunas personas acudieron con piedras, palos, y machetes para defenderse del ataque de los policías.
Alrededor de las 4:30 de la tarde se suscitó el enfrentamiento entre una población de alrededor de 350 personas de los pueblos de Ixtepec, Laollaga, y Chihuitán quienes fueron atacados por aproximadamente 1400 elementos policíacos, en su intento de acceder por la vía de la súper carretera, ya que el acceso por el municipio de Juchitán se encuentra todavía bloqueado por la barricada de maestros y de padres de familia. Otra de las acciones de defensa por parte de la población fue la quema de llantas a la altura de la caseta de vigilancia municipal de Ixtepec, para evitar la agresión de los uniformados.
Los estudiantes de la Universidad del Istmo (localizada a unos kilómetros del enfrentamiento), abandonaron la institución, y durante el trayecto a la zona urbana, varias estudiantes se encontraban tomando videos de la acción policiaca. Cuando los policías se percataron de ello, las amedrentaron y dijeron que dejaran de hacerlo, argumentando que por ese motivo las desaparecen.
El objetivo de la policía era preciso: atacar a la población de manera indiscriminada. De ello, resultaron heridas algunas personas, entre ellas población joven y adulta quienes además fueron víctimas del ingreso de la policía a su domicilio particular.
Maestros, estudiantes, y padres de familia fueron agredidos y heridos por impacto de balas de goma, petardos, y por los efectos del gas lacrimógeno, que fueron utilizados por el cuerpo policiaco.
La ambulancia del hospital general, el cual se encuentra a escasos kilómetros de donde se perpetró el ataque, se mantuvo ajena a estos actos. Y debido a ello, los heridos fueron traslados en autos particulares hasta el hospital.
La población que en ese momento era atacada en el territorio de Ixtepec comunicó a los pueblos de Mixtequilla y Tehuantepec para evitar el paso de la policía que se dirigía a Salina Cruz.
Finalmente, la policía se condujo hacia Tehuantepec, y la población agredida condenó los hechos, y quemó la caseta de cobro y la casa donde viven los trabajadores de la empresa.
Posteriormente la población encabezó una marcha mitin hacia la zona urbana de Ixtepec.
Al día siguiente, los maestros tomaron la caseta de cobro, y con acciones semejantes continúan expresando su rechazo a la mal llamada reforma educativa.