Octubre: Mes de luto y alegrías
Septiembre concuyó dejando un amargo rastro; la realidad nacional dio muestras claras de a continua y creciente descomposición del sistema político y económico que le rige. Se cumplieron dos años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, dos años en los que la responsabilidad del Estado sobre esos dolorosos hechos ha quedado consolidada, por la participación directa de elementos policiales y militares en los eventos de la noche del 26 de septiembre; por la criminal negligencia y el esfuerzo para encubrir los hechos por parte de la procuraduría y su responsable en el caso – que ha sido finalmente destituido; por el desdén con el que, a fin de cuentas, el Estado en su conjunto enfrenta los reclamos de verdad y justicia.
Se va septiembre y la depreciación del peso mexicano continúa; en sus últimos días, alcanzó el dólar niveles históricos; este proceso lleva buena parte del año, y sus motivos y consecuencias fueron analizados en un artículo publicado aquí hace 9 meses. Los factores que han acelerado esta debacle del peso tienen, a últimas fechas, un carácter claramente político, vinculados en buena medida a los posibles resultados de la próxima elección presidencial de los Estados Unidos.
El más deplorable candidato presidencial estadounidense, quien ha cimentado su campaña explotando el odio hacia la población migrante, en su mayoría mexicana, fue invitado a nuestro país por Peña Nieto, siguiendo el consejo de su Secretario de Hacienda. Luego de un penoso espectáculo que dejó en vergüenza histórica a su administración- y sirvió sólo para dar un empujón momentáneo a Trump en las encuestas-, el presidente se vió obligado a remover a su hombre de confianza del puesto clave en la gestión gubernamental. No hubo voz que aplaudiera o respaldara este nefasto episodio de ineptitud por parte del ejecutivo federal.
El nuevo secretario de Hacienda ha señalado que durante el mes de Octubre continuará la volatilidad del peso mexicano; que su valor estará directamente asociado a los resultados de la contienda electoral estadounidense, en noviembre próximo; si gana Trump, caerá el peso aún más; si gana Hillary, habrá una parcial recuperación.
Las probabilidades, en este primero de Octubre, van a favor de la señora Clinton, quien cabe decir, podrá enarbolar un discurso incluyente hacia los connacionales mexicanos en suelo estadounidense, pero no por ello engloba una diferencia sustancial en sus acciones: fue bajo su tutela como Secretaria de Estado que la guerra contra el narcotráfico se echó a andar en México; fue en esos años que la operación “rápido y furioso” introdujo al país miles de armas largas para “investigar la violencia criminal” en nuestro país, dejando como resultado miles de muertos y desaparecidos. Cabe mencionar también que el gobierno demócrata de Barack Obama ha llevado adelante deportaciones de migrantes en cifras nunca antes vistas.
El hecho de que el valor de nuestra moneda dependa de los resultados de una contienda política extranjera es una clara muestra de las debilidades de nuestra economía; los resultados de la devaluación del peso conducen a un incremento de la inflación, la reducción del poder adquisitivo, reducción del gasto gubernamental, y en concreto, el incremento del hambre y la pobreza en nuestro país. El contraste de esto con la cotidianidad económica mexicana, cargada de intensa actividad productiva, es dramático. A pesar de ser una de las 20 economías más grandes del planeta, la economía mexicana no tiene en su poder los instrumentos necesarios para garantizar que haya pan en las mesas de sus hogares, gane o pierda Trump.
Que el destino de nuestro pueblo -en sus más apremiantes necesidades- esté decidido en un proceso político extranjero; que las directrices económicas persigan la continuidad de estas condiciones de debilidad, en pos de un modelo impuesto; que el gobierno mexicano abra las puertas a quien despreciándonos nutre su poder, y se doblegue a sus intereses; que el Estado en su conjunto se vea una y otra vez involucrado en el entierro represivo de las voces disidentes… todo ello tiene un nombre: imperialismo.
Efemérides.
Octubre no se olvida, nuestro pueblo incluye en su memoria la masacre de estudiantes por parte del Estado mexicano, por el solo hecho de reunirse para exigir libertad, el 2 de Octubre de 1968. Recordamos también la muerte del guerrillero heroico, Ernesto Che Guevara, quien cayó en combate el 9 de Octubre del año anterior. Octubre nos dice que no debemos bajar la guardia; para nuestros pueblos aún no hay justicia, aún no hay libertad, aún no hay democracia.
Las compañeras y compañeros de La Casa de Todas y Todos celebramos en Octubre, con alegría el cumpleaños de nuestra inolvidable compañera Paz o Aurora, nombres que ella utilizó, fue nuestra dirigente en la lucha y murió defendiendo sus ideales. También en Octubre celebramos el nacimiento de nuestro primer dirigente histórico, el compañero Pedro o Manuel forjador de conciencias, quien nació un 23 de Octubre; él es uno de esos desaparecidos que siguen vivos reclutando sin descanso a otros, hasta que nuestro pueblo sacie los anhelos de libertad negados. También celebramos a Pedrín el joven recluta de 1979, que con el paso de los años integró los primeros contingentes del Ejército del Pueblo en 1983 al cual encabezó como era su deber la madrugada del 1o de Enero de 1994 en las primeras líneas de combate, no podía ser de otra manera. Son solo tres compañeros los que encabezan la lista pero existen más, muchísimos más, mujeres y hombres dignos, anónimos que están en nuestra memoria colectiva y en nuestro corazón, son todas aquellas y aquellos que con su trabajo diario realizan las pequeñas tareas a las que se comprometieron e hicieron y hacen avanzar a las FLN: las hay maestras y maestros abnegados, doctoras y doctores, enfermeras, radiotécnicos, soldadores, zapateros, torneros, mecanógrafas, impresores, fotógrafos, artistas, videoastas y la lista sigue interminable, son todo nuestro pueblo consciente y trabajador. Para todos ellos con admiración y respeto decimos:
¡Vivir por la Patria! o ¡Morir por la Libertad!
Grupo Editorial de la Casa de todas y todos