Editorial Enero, 2021

La cadena de la historia

“Quienes de tal modo razonan, olvidan que la cadena se rompe por el eslabón más débil”


Compañero Pedro, Marzo de 1970.
Cuaderno de Trabajo Dignificar la Historia I,
Las Fuerzas de Liberación Nacional y la guerra fría en México (1969-1974)
 Pag. 58.

Los primeros de Enero son fechas que aprovechamos para hacer recuentos del año viejo. Este que concluyó, el 2020, sólo dejo más miseria, tristeza y exclusión en millones de corazones. Un agente patógeno, el Covid-19, desmontó todo lo usual, lo cotidiano, y nos recluyó -a reserva de enfermar, agravarse y morir-. Eso ya nos quedó claro a todos.  Los avances médicos, una mayor paciencia, y sobre todo la lucha contra la exclusión, serán necesarios en el año que comienza.

Por otro lado, en lo político, conviene en esta reflexión anual recordemos lo que se dijo hace ya más de 50 años por nuestros predecesores, que “la cadena se rompe por el eslabón más débil”. Estas palabras sencillas. pero ciertas, se materializaron hace 27 años, que después de tensar la cadena a través de la miseria, la pobreza y la exclusión, un día primero de enero de 1994 terminó rompiéndose -justo por ser el eslabón más débil-, en las montañas de México. Esto hecho pareciese sencillo, pero no lo fue, sino que fue el resultado de un esfuerzo colectivo inmenso. En un lado de la cadena estaban los sectores empobrecidos y marginados urbanos, y del otro las comunidades campesinas excluidas y olvidadas.

Fue un camino largo, difícil, y cruento pero a nadie se  engañó diciéndonos que iba a ser un camino sencillo, y fue así cuando aprendimos una vez más de los fundadores de las FLN que “Los enemigos que se oponen son muchos, inclusive, una buena parte y los más  difíciles de erradicar  los tenemos dentro de nosotros mismos, son de origen subjetivo,” (Op. Cit. pag. 48. Año 1969).  

Múltiples han sido los ejemplos históricos de flaquezas y traiciones en este largo camino de la liberación nacional en México, tanto así que aún hoy algunos compañeros que defeccionaron de las FLN consideraron que participar en las elecciones en México, ese sistema pútrido y corrupto de origen, conduciría a “algo” bueno y participaron en ellas; de igual manera, deciden ahora promover un “viaje turístico” con el indigno propósito de llegar a exonerar al imperio absolutista Español responsable de la brutal masacre de los pueblos indígenas de México y Mesoamérica durante la Conquista y la Colonia. Nosotros rechazamos, condenamos y nos deslindamos de esos actos serviles, y en este caso seguiremos el ejemplo y la consigna de las valerosas madres de los desaparecidos por este sistema de terror: ¡Ni Perdón, Ni Olvido!

Además, también hemos encontrado a esos los intelectuales orgánicos principalmente aquellos que distorsionan historia de las FLN para alinearla al interés de un grupo o individuos. A esta Grupo Editorial  de la Casa de Todas y Todos nos queda claro que a la Historia o se dignifica dando voz a sus protagonistas, a sus testimonios, a sus escrito, en un ejercicio transparente y honesto o se distorsiona utilizando documentos de archivos policiacos -llámese CISEN, DFS o inteligencia militar, etc.- que fueron integrados como resultado de la represión, muerte y tortura de mujeres y hombres.

Más relevante aún, es recordar con respeto a las Compañeras y Compañeros  que murieron sin importarles lo “poderoso” del enemigo. El mundo entero escuchó el grito de  ¡Ya Basta! surgido desde diferentes espacios del territorio chiapaneco, donde combatieron las tropas encabezadas por el Sub Comandante Pedro un primero de Enero, el día que se rompió el eslabón más débil de la cadena de injusticias. Ese día tanto él, Sub Pedro, el compañero Hugo (Francisco Gómez) y otros más compañeros insurgentes cayeron combatiendo y cumpliendo su compromiso. Para ellos, igual que para otros compañeros que nos dejaron en otro Enero, como el Compañero Romeo en 1993, pilar de ayuda fundamental desde los primeros días de la fundación de 1969 y que muere precisamente días antes de la fundación de nuestro Partido de las FLN que sucede también en Enero de 1993, va nuestro reconocimiento y nuestro eterno..

“¡Vivir por la Patria! o ¡Morir por la Libertad!”

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos