Palabras del Padre Guerrero en la presentación de Dignificar la Historia, en el ITESM.
Este libro es muy importante, porque nos ilustra sobre las Fuerzas de Liberación Nacional y la guerra fría en México, en un periodo de la historia (1969 – 1974); donde los ciudadanos se organizaron para hacer frente a un gobierno que reprimía las exigencias de libertad y de justicia, de toda la nación.
Muchas veces hemos pensado que los habitantes de esta ciudad, siempre hemos estado apáticos de las luchas sociales y que nos entretenemos fácilmente con el futbol semanal, la cerveza al por mayor y la aceptación de una sociedad de consumo que nos garantiza mucha diversión.
Pero, tal parece que no siempre ha sido así; porque antes y después de 1969, hubo aquí ciudadanos comprometidos, que desde esta ciudad industrial, impulsaron movimientos sociales cuyo impacto fue en todo el país o incluso fuera de él, como es el caso del EZNL.
Ellos supieron recoger la indignación social de muchos estudiantes universitarios y de muchos profesionistas, que en ese momento le apostaban a la bondad del bien común, dentro de una sociedad que se encaminaba, ya desde entonces, al neoliberalismo donde lo que vale es el capital y donde la dignidad humana solo es mercancía que se compra y se vende.
En ellos había sueños verdaderos que los impulsaban a luchar educando, concientizando y acompañando a los de abajo.
Ya desde entonces se nos decía “A jalar que se ocupa”, cuando realmente lo que se ocupa es pensar leyendo, analizar sin prejuicios, comprender en medio de la lucha activa y propiciar transformaciones reales en medio de esta sociedad, que sigue dando prioridad al trabajo para tener más capital con el que se pueda comprar muchas cosas que no necesitamos para ser felices.
Un día estos luchadores sociales, pusieron su profesión, su inteligencia y sus talentos, al servicio de sus comunidades, de esta ciudad y de toda nuestra Patria.
Yo los invito a hacer lo mismo, porque la brecha social sigue siendo injusta… el sistema sigue favoreciendo que la riqueza siga siendo mal distribuida y se concentre en unos cuantos, mientras las inmensas mayorías han sido convencidas por los gobiernos corruptos que deben “Jalar” todos los días porque eso es lo que se ocupa para aumentar las ganancias de muchos patrones que el domingo comulgan y entre semana se olvidan de la moral y de la ética, sin importarles que los salarios de sus empleados y trabajadores, sigan siendo de miseria, y sin que puedan comprender que están condenados a vivir en esa pobreza que lastimaba en 1969 y sigue lastimando actualmente.
La fuerza de su lucha sigue inspirándonos, sobre todo ahora cuando no estamos todos porque aquí en el Tec faltan Jorge y Javier, en Ayotzinapa nos faltan 43, y nos faltan dolorosamente miles de desaparecidos mas, cuya memoria sigue siendo ignorada por las autoridades que debieran garantizar justicia, pero que no lo hacen porque son sirvientes del poder municipal, estatal, nacional y extranjero.
Lo que ellos impulsaron en esos años de guerra fría, hoy lo están impulsando otros desde diversas trincheras.
Y lo están haciendo sin colores partidistas y sin ocultos intereses… Lo están haciendo recogiendo firmas para solicitar que se hagan ley las tres declaraciones de todos los funcionarios públicos, y para que los ciudadanos opinen sobre el nefasto proyecto del MTY VI, defendiendo el cerro de la Silla en Guadalupe y oponiéndose a las pedreras en Santa Catarina, exigiendo la búsqueda de los que no regresaron a casa y cuidando el rio San Juan de los deshechos tóxicos que Pemex tira a las comunidades campesinas todos los días.
Lo están haciendo porque tienen sueños, a pesar de que les enseñaron, por medio de Hollywood, que fuera del mercado neoliberal no hay utopías y que el único sueño valido es el americano capitalista.
Realmente, ¿Estará prohibido soñar con un mundo fraterno y solidario, donde no haya opresores ni oprimidos y en el cual las diferencias sexuales, raciales, económicas, técnicas y religiosas no constituyeran desigualdades entre las personas?
Platón, Tomás Moro y Campanella, cada uno a su modo, soñaron con ese mundo utópico.
Las Fuerzas de Liberación Nacional, lo siguen haciendo….. Enfrentándose a la propaganda masiva que inunda nuestras vidas diciéndonos: La única opción que queda es entre capitalismo y capitalismo… Y la ascética económica, bajo la promesa de glorias futuras, es especialidad del FMI.
Las utopías se volatizaron, los paradigmas se desplomaron y la esperanza exige hoy la linterna de Diógenes. Cae la nieve en nuestros corazones y mentes.
Si hoy no nos unimos y no nos organizamos con inteligencia para luchar por nuestra dignidad y nuestros derechos humanos; terminaremos creyendo en las propiedades nutritivas de las hamburguesas McDonald’s. En la feria del libro los libros más vendidos serán los esotéricos y los infantiles, mientras la matemática de Descartes cederá su lugar a las energías cósmicas y aumentará, sin que nos demos cuenta, la idolatría del capital y del mercado.
“Creo , con Margarita”, que el “nos deben” de la Rectora de la Universidad Autónoma Veracruzana, viene al caso en general para este momento que estamos viviendo de la política de despojo y extractivismo, de aplicación de megaproyectos que se intentan materializar a espaldas de los afectados y afectadas, con el único propósito de privatizar todo, y que nosotros y nosotras dueños y dueñas de un territorio, sea urbano o del campo nos quedemos en la calle para después ser ejecutados porque somos simplemente desechables, ya no le hacemos falta al Estado, aún más y defender el conocimiento, completo no fragmentado al que se tiene derecho.
Termino felicitando al doctor Neil Harvey por este gran trabajo y agradezco, por su invitación, a la casa de todos y todas y a la Asociación Estudiantil por los Pueblos Indígenas.
Soy el Padre Guerrero y esta es mi humilde opinión.